El Congreso de la República ha promulgado una nueva ley, aprobada por insistencia, que otorga diversos beneficios económicos a los docentes ordinarios de educación superior en Perú. Esta ley, identificada como la Ley 32091, fue publicada en la separata de normas legales del Diario Oficial El Peruano, y añade tres artículos clave a la Ley Universitaria (Ley 30220).
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Compensación por tiempo de servicios (CTS)
Uno de los principales beneficios que establece esta nueva normativa es la compensación por tiempo de servicios (CTS). Según el artículo 96-A de la ley, los profesores que sean cesados recibirán una compensación equivalente al 100 % de su remuneración mensual por cada año o fracción de año trabajado. Este pago se hará de manera escalonada. Para los docentes que cesaron en 2023, el abono será del 50% en el mismo año, 30 % en 2024 y 20 % en 2025. Aquellos que cesen en 2024 recibirán el 70 % de su CTS en el presente año y el 30 % restante en 2025. Finalmente, los que cesen en 2025 recibirán el 100% de su CTS al momento del cese.
Asignación por años de servicio
Además de la compensación por tiempo de servicios, el artículo 96-B introduce una asignación por años de servicio. Los docentes recibirán el equivalente a dos remuneraciones mensuales al cumplir 25 años de servicio y tres remuneraciones mensuales al cumplir 30 años de servicio. Este reconocimiento económico busca recompensar la dedicación y el compromiso de los profesores con la educación superior en el país.
Subsidio por luto y sepelio
El artículo 96-C, también añadido a la Ley Universitaria, establece el derecho de los docentes ordinarios a un subsidio por luto y sepelio. Este beneficio será otorgado al fallecer el cónyuge, conviviente reconocido judicialmente, padres o hijos del docente. En caso de fallecimiento del propio docente, el subsidio será entregado a su cónyuge, hijos, padres o hermanos, siguiendo un orden de prelación excluyente. El monto de este subsidio será determinado por el Poder Ejecutivo a propuesta del Ministerio de Educación.
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Impacto y recepción de la ley
La promulgación de esta ley representa un paso significativo en el reconocimiento de la labor docente en el ámbito universitario.
La compensación por tiempo de servicios y las asignaciones por años de servicio son medidas que buscan mejorar las condiciones laborales de los profesores, incentivando su permanencia y compromiso con la educación superior.
Asimismo, el subsidio por luto y sepelio ofrece un apoyo económico en momentos difíciles, proporcionando un respaldo a las familias de los docentes.
Las reacciones ante la nueva ley han sido variadas. Muchos docentes han expresado su satisfacción y consideran que estos beneficios son un reconocimiento merecido a su labor y dedicación. Sin embargo, también hay quienes señalan la necesidad de que estos beneficios se extiendan a otros niveles educativos y que se garantice su implementación efectiva.
Retos y expectativas futuras
La implementación de esta ley plantea varios desafíos. Uno de los principales es asegurar que los recursos necesarios para cumplir con estos beneficios estén disponibles y se administren de manera eficiente. El Ministerio de Educación y el Poder Ejecutivo tienen la responsabilidad de establecer los montos del subsidio por luto y sepelio y garantizar que los pagos de CTS y asignaciones por años de servicio se realicen conforme a lo estipulado.
Además, es crucial que se mantenga un diálogo abierto con los gremios de docentes y que se realicen las evaluaciones necesarias para medir el impacto de estas medidas. Esto permitirá ajustar y mejorar las políticas en beneficio de los profesores y, en última instancia, de la calidad de la educación superior en el país.
La Ley 32091 también abre la puerta a futuras discusiones sobre la mejora de las condiciones laborales de los docentes en otros niveles educativos. El reconocimiento económico y los beneficios sociales son aspectos esenciales para motivar y retener a los profesionales de la educación, quienes desempeñan un rol fundamental en el desarrollo del país.