El dengue es una enfermedad causada por un virus y se transmite a las personas por la picadura del mosquito portador de la enfermedad. El dengue es causado por la picadura de las hembras infectadas con el virus de  los mosquitos del género Aedes. Es similar a la gripe que afecta a lactantes, niños pequeños y adultos. El periodo de incubación es de 2 a 7 días a partir del contacto con el virus, puede ser potencialmente mortal, pero con un diagnóstico clínico precoz y se puede salvar la vida de los pacientes. No es contagioso, no se transmite de una persona a otra, y, actualmente, no hay vacuna para combatirlo.

Los signos y los síntomas más frecuentes:

1. Fiebre alta
2. Náuseas y vómitos.
3. Fácil formación de moretones o erupción en la piel.
4. Sangrado leve en la nariz o las encías.
5. Dolor detrás de los ojos y en las articulaciones, los músculos y/o los huesos.
6. Fuerte dolor de cabeza.
7. Sarpullido en la mayor parte del cuerpo.
8. Debilidad general.
9. Si sospecha que podría tener la fiebre del dengue, llame a su médico de inmediato.

Prevención:

Para prevenir la transmisión del virus del dengue es necesario seguir las siguientes recomendaciones:

• Mantener el ordenamiento del medio ambiente para evitar que los mosquitos encuentren lugares donde depositar sus huevos.
• Eliminar correctamente los desechos sólidos y los posibles hábitats artificiales.
• Aplicar insecticidas adecuados a los depósitos en los que guarda agua a la intemperie.
• Cambiar periódicamente el agua de los jarrones.
• Limpiar y mantener en buen estado las canaletas.
• Utilizar mosquiteras en las ventanas y usar ropa de manga larga.
• Evitar la acumulación de agua en el interior de recipientes (como llantas, botellas, ollas, etc.).
• Mantener boca abajo los recipientes en desuso.
• Tapar los recipientes utilizados para almacenar agua.
• Fumigar zonas y productos susceptibles de traer mosquitos (maderas y neumáticos, por ejemplo).