El bruxismo, el mal que causa dolor de mandíbula, cuello rígido y cansancio
julio 3, 2025
Autor: Actualidad El Tiempo

Compartir:

[social-share]

¿Te despiertas con la mandíbula adolorida, el cuello tenso o la sensación de no haber descansado bien? Podrías estar sufriendo de bruxismo, un hábito involuntario que consiste en apretar o rechinar los dientes, ya sea de día o mientras duermes. El bruxismo suele pasar desapercibido y puede generar dolores crónicos, desgaste dental y afectar tu calidad de vida.

LEER MÁS ► Fiscalía investiga a alcalde de Nasca por la reducción de terrenos de las Líneas de Nasca

“El bruxismo es una condición multifactorial que muchas veces pasa desapercibida, pero que puede generar dolor mandibular, rigidez en el cuello, cefaleas y fatiga muscular. Es más común de lo que pensamos, especialmente en contextos de estrés o con rutinas prolongadas frente a pantallas”, explica el doctor Jorge Silva Terán, especialista en medicina física y rehabilitación de la clínica Anglo Americana.

Las causas varían desde el estrés, los trastornos del sueño o una desalineación dental, hasta factores posturales sostenidos por muchas horas. De hecho, es frecuente en adultos jóvenes que trabajan largas jornadas frente a la computadora y no prestan atención a la tensión acumulada en mandíbula y cuello. Como resultado, el cuadro suele desarrollarse sin que el paciente sea plenamente consciente, hasta que el dolor, el insomnio o incluso la fractura dental se hacen evidentes.

Los síntomas más frecuentes del bruxismo incluyen dolor o rigidez en la mandíbula, molestias cervicales, cefaleas tensionales, sensación de cansancio al despertar, despertares frecuentes durante la noche y desgaste o fracturas en piezas dentales.

“Cuando estos signos se presentan en conjunto y de manera persistente, es importante no subestimarlos y acudir a una evaluación médica que permita identificar si hay un trastorno funcional detrás”, recomienda el especialista.

El vínculo entre el bruxismo y el dolor cervical está en la conexión directa entre la articulación temporomandibular y la musculatura del cráneo y el cuello. Cuando los músculos masticatorios se mantienen contraídos de forma constante, pueden irradiar tensión hacia los músculos cervicales, provocando rigidez, mala postura y dolor crónico.

“El problema no se limita a los dientes o la mandíbula. Muchas veces vemos pacientes con cuadros musculares complejos, fatiga persistente o dolor de cabeza crónico cuya causa inicial fue un bruxismo no tratado”, advierte Silva Terán.

¿Cómo puede tratarse el bruxismo?

El abordaje del bruxismo debe ser integral y personalizado. Según el caso, puede incluir una evaluación odontológica para verificar el desgaste dental y, de ser necesario, el uso de férulas oclusales para proteger la dentadura. También se indica fisioterapia especializada en la región cráneo-cervical, junto con técnicas de manejo del estrés, como la relajación progresiva o la terapia psicológica.

En casos más severos, una alternativa eficaz es el uso terapéutico de toxina botulínica, que permite relajar los músculos masetero y temporal, responsables de la contracción excesiva. “La toxina botulínica se aplica con fines médicos para reducir la hiperactividad muscular. En pacientes con bruxismo crónico o resistente, puede aliviar significativamente el dolor mandibular y cervical, y mejorar la calidad del sueño”, señala el doctor Silva.

Más populares
[imagen_perfil_autor]
Actualidad El Tiempo
[linkedin_autor]
Publicidad