Adelantándose a la avalancha de críticas que se le venían, como la enérgica reacción del gobernador regional Luis Neyra -tal como dio cuenta ayer El Tiempo-, el ministro de Salud, César Vásquez Sánchez, finalmente dio marcha atrás y a través de las redes sociales del Ministerio de Salud tuiteó que el hospital de alta complejidad para Piura sí va.
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En clara alusión a las declaraciones de la autoridad regional, quien afirmó que el flamante titular del Minsa busca dejar a Piura sin esta obra anhelada desde hace más de 25 años, el aludido respondió ayer que “si bien uno de los ejes centrales de (mi) gestión será el fortalecimiento del primer nivel de atención, ello no significa que se deje de lado proyectos de grandes hospitales”.
Es impresionante que el mismo ministro que pocas horas antes le dijo al representante de Piura que para él (César Vásquez) el reclamado hospital no era tan importante como los centros de salud de primer nivel; cambié de discurso: “Con el Hospital de Alta Complejidad de Piura, se asegura una atención de salud de calidad para el pueblo piurano, integrándolo a su bienestar comunitario; potenciando la docencia, la investigación y la innovación”.
Es importante que el señor ministro haya reaccionado con rapidez en un claro intento de no caer en el nivel confrontacional de su antecesora. Sin embargo, para las autoridades y representantes de la sociedad civil esta actitud cambiante no debe pasar desapercibida, pues a fin de cuentas solo son declaraciones.
No solo no hay ningún papel firmado sino que resulta muy difícil confiar en un ministro que hasta hace pocas horas estaba a punto de reunirse con el ministro de Economía para plantearle que el hospital de Piura ya no vaya, según ha dicho el gobernador.
Autoridades, colectivos ciudadanos, colegios profesionales, sector privado y congresistas, lo mínimo que deben hacer es sumarse a la causa, a este justo reclamo. No vaya a ser que dejarnos sin esta obra vital sea el precio puesto por el partido del que procede el ministro, para seguir apoyando al Gobierno de Boluarte.