Tras la muerte de uno de los serenos de la comuna de Sullana por COVID-19, sus compañeros de trabajo que están aislados piden más atención, pues temen correr la misma suerte.
Los agentes aislados contaron que luego de ser enviados a cuarentena, el municipio no los ayuda. Este medio se contactó con uno de los serenos aislados, quien manifestó sentirse abandonado por su institución, pues cuando se infectó solo lo mandaron a su vivienda y le dijeron que cuando se cure regresaría a laborar.
“Nadie pregunta por nuestra salud, solo el coronel Santín (subgerente de Seguridad Ciudadana) me envió 25 soles de su bolsillo para unas pastillas”, narró.
Según los mismos serenos, son seis los infectados, entre ellos una mujer que proviene de Salitral, cuyo padre falleció por coronavirus en el hospital Santa Rosa.
Los agentes indicaron que casi 50 presentan síntomas, y el alcalde Power Saldaña les prometió que les harían las pruebas rápidas, pero esto no se ha cumplido.