El Jefe de la Dirección de Inteligencia, Aharon Haliva, anunció el lunes su renuncia al cargo, asumiendo la responsabilidad por la falta de acción militar que no pudo prevenir el ataque masivo de Hamás el 7 de octubre pasado, que resultó en la muerte de 1.200 personas en territorio israelí.

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«En coordinación con el Jefe del Estado Mayor y con la aprobación del Ministro de Defensa, se ha decidido que el general Aharon Haliva dejará su cargo y se retirará de las Fuerzas de Defensa de Israel una vez que su sucesor sea designado», indicó un comunicado militar emitido hoy.

La renuncia de Haliva marca el primer caso de un alto funcionario que dimite debido a los errores relacionados con el ataque de Hamás. Tras el incidente, el Ejército lanzó una investigación interna en febrero, cuyos resultados se esperan para principios de junio y serán presentados al Jefe del Estado Mayor, el teniente general Herzi Halevi.

¿Haliva asumió parte de la culpa por la lenta respuesta militar?

Tras el ataque de Hamás en octubre, Aharon Haliva, con 38 años de servicio en las Fuerzas de Defensa de Israel, reconoció su responsabilidad parcial en la respuesta tardía contra los miles de milicianos que tomaron el control de varias comunidades israelíes y se desplegaron armados en un 3 % del territorio.

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¿Qué revela la investigación interna en curso?

La investigación en curso tiene como objetivo examinar la respuesta de las tropas antes y después del ataque, así como su despliegue en el terreno y los procedimientos operativos utilizados para neutralizar a los combatientes.

Según una encuesta reciente del Instituto de la Democracia de Israel, el 62 % de la población israelí, tanto judíos como árabes, cree que los responsables de los errores del 7 de octubre deberían renunciar, más de seis meses después de la masacre.