La madrugada de este sábado en una zona mapuche del sur de Chile, tres policías perdieron la vida en una emboscada, coincidiendo con la conmemoración del aniversario de la institución policial, según informó el presidente Gabriel Boric.

El mandatario, quien se dirigía hacia la región, comunicó en su cuenta de X el trágico incidente: «Esta madrugada recibimos la grave y dolorosa noticia de un atentado en la provincia de Arauco en el que fueron asesinados tres carabineros».

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Los cuerpos de los policías fueron hallados calcinados dentro de una patrulla en una ruta de la localidad de Cañete, cerca de Concepción, a unos 500 km al sur de Santiago. La zona ha sido objeto de resguardo militar debido a ataques incendiarios, mayormente atribuidos a grupos radicales mapuches, la principal etnia chilena, que reclama la devolución de tierras ancestrales.

El atentado ocurrió en la misma semana en que la justicia declaró culpable de diversos delitos a Héctor Llaitul, líder de la Coordinadora Arauco-Malleco (CAM), grupo que ha reivindicado ataques en la región.

«No fue un acto aleatorio», afirmó el director general de Carabineros, Ricardo Yañez, subrayando la coincidencia con el aniversario de la institución. Las celebraciones fueron canceladas y se declararon tres días de duelo oficial.

El presidente Boric prometió que no habrá impunidad y calificó a los responsables como «terroristas». En señal de unidad, viajaron hacia Concepción autoridades militares y parlamentarias.

Boric había decretado la militarización de la provincia de Arauco hace casi dos años para enfrentar los ataques incendiarios, que han afectado principalmente a la industria forestal. A pesar de los esfuerzos, algunas comunidades mapuches radicales siguen demandando la restitución de tierras.