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Encuestas de bienestar y salud: cómo diseñarlas y aprovecharlas en tu organización

septiembre 10, 2025
Autor: Redacción El Tiempo

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Las encuestas de bienestar y salud son una de las herramientas más potentes para entender cómo se siente tu gente, anticipar riesgos y orientar decisiones con impacto real. Si las haces bien, no solo capturas síntomas; también explicas causas, priorizas acciones y construyes una cultura de cuidado que se traduce en productividad, retención y reputación.

La Encuesta de bienestar y salud para empleados evalúa condiciones físicas, mentales y sociales en el trabajo; la Encuesta de bienestar personal profundiza en hábitos, sueño, actividad física y apoyo social fuera del entorno laboral; y la encuesta de bienestar laboral se enfoca en la experiencia diaria: carga, ritmos, liderazgo, clima, pausas y ergonomía. Usarlas de forma complementaria te permite ver el “sistema completo” y no solo una parte aislada.

En el Perú, los datos refuerzan la urgencia de medir: en 2023 el Minsa atendió 280 917 casos de depresión, y la OMS advierte que 1 de cada 6 personas a nivel mundial experimenta soledad con efectos severos en salud física y mental. Ambos hallazgos subrayan la necesidad de encuestas de bienestar y salud que detecten a tiempo malestar, aislamiento y sobrecarga, y que conecten a las personas con apoyos eficaces.

Marco normativo en Perú que te conviene conocer

La Ley 29783 de Seguridad y Salud en el Trabajo y su Reglamento (D.S. 005-2012-TR) obligan a identificar, evaluar y controlar riesgos, incluidos los psicosociales. Esto respalda el uso sistemático de encuestas para monitorear factores como carga mental, violencia laboral o jornadas extensas. Si lideras un equipo, estás llamado no solo a medir, sino a actuar sobre los hallazgos.

En 2024, las autoridades publicaron instrumentos específicos para el análisis psicosocial. El Minsa difundió un Cuestionario de Identificación y Evaluación de Riesgos Psicosociales aplicable a distintos rubros, y el MTPE emitió una guía de prevención y control para estos riesgos, útil para estandarizar tus encuestas y sus planes de acción. Usar estos referentes te ayuda a cumplir y a comparar tus resultados.

Qué medir (y por qué)

Estructura tu cuestionario en cinco bloques: 1) salud mental (ánimo, estrés, sueño, energía), 2) salud física (dolor musculoesquelético, actividad, pausas), 3) entorno social (apoyo de pares y jefaturas, pertenencia, soledad), 4) organización del trabajo (carga, autonomía, claridad de rol, tiempos), y 5) hábitos y autocuidado (alimentación, consumo de alcohol/tabaco, hábitos sedentarios). La OMS remarca que fortalecer la conexión social reduce riesgo de enfermedad y muerte prematura, por lo que incluir preguntas de pertenencia y redes de apoyo es clave.

Para contextualizar, toma como línea base estadísticas nacionales (por ejemplo, indicadores de la ENDES 2023 del INEI sobre condiciones de salud). Aunque tus encuestas no sustituyen a la estadística oficial, sí permiten ver tendencias internas y detectar brechas específicas por sede, turno o área.

Fuente: Pexels

Cómo diseñar tu encuesta paso a paso

Define objetivos SMART: “Reducir en 15 % el puntaje de fatiga reportada en logística en 6 meses”. Elige escalas Likert de 5 puntos con formulaciones claras (“nunca—siempre”) y evita ítems ambiguos. Mezcla preguntas cerradas para puntuar avances con 2–3 abiertas que revelen matices y causas.

Garantiza anonimato y explica para qué se usarán los datos. Los equipos responden mejor si ven un compromiso explícito: publicarás resultados agregados y tomarás medidas. Aplica una Encuesta de bienestar y salud para empleados semestral, refuérzala con pulsos breves mensuales (5–7 ítems) y añade una Encuesta de bienestar personal anual para hábitos de largo plazo.

Buenas prácticas de medición

Calibra el instrumento con una prueba piloto en 5–10 % de la población y analiza confiabilidad (α de Cronbach ≥ 0,70 por dimensión). Segmenta por sede, modalidad (presencial/híbrido/teletrabajo) y antigüedad, cuidando no romper el anonimato en áreas pequeñas. Incluye un ítem señuelo para detectar respuesta automática y establece tiempos máximos: 8–12 minutos es un punto dulce para tasas de respuesta altas.

Del dato a la acción

Presenta un tablero con tres niveles: índice global, dimensiones y focos (p. ej., “pausas activas” o “claridad de rol”). Define propietarios de cada mejora, plazos y recursos. Si detectas señales de riesgo (insomnio, ideación autolesiva, acoso), activa rutas de derivación y soporte inmediato. En el país existe una red creciente de Centros de Salud Mental Comunitaria que facilita la referencia oportuna y la continuidad del cuidado.

Enfoque de salud mental en el trabajo

Sigue las directrices de la OMS para salud mental laboral: prevenir riesgos, proteger a quienes viven con condiciones de salud mental, y facilitar el regreso/acomodo razonable. Eso se traduce en políticas claras antiacoso, cargas razonables, capacitación a jefaturas y acceso a ayuda psicológica. Integra estas pautas en tu encuesta de bienestar laboral para monitorear el cumplimiento.

Errores comunes que debes evitar

No mezcles en una misma métrica clima y salud; terminarás con conclusiones tibias. Evita preguntas que “induzcan” respuestas positivas (“mi jefe siempre me apoya, ¿cierto?”). No publiques resultados sin plan de acciones: perderás confianza. Finalmente, no apliques encuestas extensas sin retorno de resultados; genera fatiga y baja la tasa de participación.

Indicadores útiles para tu tablero

  • Índice de energía (promedio de ítems de sueño, fatiga y recuperación).
  • Índice psicosocial (carga, autonomía, apoyo, claridad de rol).
  • Indicador de conexión (pertenencia, apoyo, soledad).
  • Señales tempranas (dolor cervical/lumbar, pausas, pausas activas).
    Relaciona estos indicadores con ausentismo, rotación y productividad para estimar impacto de tus intervenciones. Si un área muestra alto estrés y baja claridad de rol, prioriza el rediseño de procesos antes que talleres genéricos.

Fuente: Pexels

Preguntas que no deben faltar

  1. “En la última semana, ¿con qué frecuencia te sentiste abrumado por el trabajo?”
  2. “¿Cuentas con apoyo suficiente de tu jefatura para cumplir tus objetivos?”
  3. “¿Sientes pertenencia al equipo?”
  4. “¿Pudiste realizar pausas y estiramientos durante la jornada?”
  5. “Si lo requieres, ¿sabrías a dónde acudir para recibir apoyo emocional o psicológico?”

Estas preguntas, combinadas con bloques sobre hábitos y organización del trabajo, dan señales accionables y evitan encuestas decorativas.

Implementar encuestas de bienestar y salud es una decisión estratégica: te ayuda a cumplir la ley, a proteger a tu equipo y a convertir el cuidado en una ventaja competitiva. Empieza pequeño, mide lo esencial, comunica con transparencia y ejecuta mejoras visibles; luego, madura el sistema con indicadores comparables y rutas de apoyo claras. 

Con ese ciclo, tus encuestas de bienestar y salud dejan de ser un trámite y se vuelven un motor de cambio sostenible.

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Redacción El Tiempo
Redacción El Tiempo. Autor de contenidos y de las últimas noticias del diario El Tiempo. Experiencia como redactor en varias temáticas y secciones sobre noticias de hoy en Piura, el Perú y el mundo.
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