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El cuerpo humano está acostumbrado a consumir los productos muchas veces pensando en la caducidad del mismo, sin saber que existen métodos u otros productos que pueden durar más tiempo conservados en frío o almacenados correctamente.
Por lo tanto, a continuación se presentan algunos de los alimentos que pueden conservarse por más tiempo o muchas veces para siempre.
Frutas y verduras congeladas
Se cree que las frutas y verduras deben de comerse estando frescas o recién compradas lo más rápido posible por miedo a que se descompongan. La realidad es que dentro del congelador puede durar hasta 1 año en perfectas condiciones en un envase cerrado.
Se recomienda cortar en pedazos pequeños y que se coloquen dentro de un congelador para que puedan disfrutar cuando deseen de ellas por un tiempo prolongado y sin perder sabor.
En Perú, la gran mayoría de frutas y verduras se pueden conseguir en los grandes supermercados como Plaza Vea. Existe contenido online que se puede revisar, tal como las páginas con carritos de compra o el catálogo de Tottus para comprobar la disponibilidad de los productos.
Cereales
Los cereales claramente pueden durar almacenados mucho tiempo sin deteriorarse. Lo único que puede acortar su vida útil son algunos insectos que encuentran hábitat y alimento en los mismos.
Para incrementar la vida útil de algunos alimentos, como por ejemplo el arroz, es recomendable usar un franco de vidrio dónde almacenarlo y una tapa que cierre de forma hermética y sellada al vacío. Esto le dará varios años de vida.
Pastas
La pasta cruda y seca puede mantenerse fresca en un ambiente adecuado, cerrada de forma hermética o al vacío puede ser comestible durante mucho tiempo. Solo factores externos como hongos, insectos, humedad o altas temperaturas pueden dañar la pasta que se encuentre almacenada.
Si es sellada al vacío y colocada en un refrigerador o congelador, nunca perderá su textura ni sabor y puede ayudar a que el producto dure más tiempo fresco que si es refrigerado después de cocinado.
Carnes saladas
La técnica de salar las carnes es tan antigua como la sociedad misma.
La sal preserva fácilmente los productos cárnicos y aleja insectos y hongos que puedan acelerar el proceso de descomposición. De hecho, un corte de carne tratado con sal para preservarlo puede durar aproximadamente 6 meses almacenado en un espacio con buenas condiciones higiénicas.
Lácteos en polvo
Los lácteos como la leche y el queso en sus versiones en polvo fueron hechos con la intención de que tuvieran una vida útil prolongada en varias condiciones.
Pero, existe una forma de que estos duren hasta 15 años. Mantenerlos sellados al vacío a una temperatura ambiente de 21 grados su tiempo de conservación se extiende de una forma proporcionalmente larga.
Miel
La miel natural es posiblemente el alimento más longevo conocido, su composición le permite ser almacenado y durar cientos de años y si es almacenado de forma hermética puede durar miles. Es bien conocido que en un sarcófago egipcio se encontró un frasco de miel que tenía 6.000 años y aún era comestible.
Esto es posible ya que es muy bajo en humedad, tiene un pH de entre 3 y 4,5 aproximadamente haciendo de este un alimento muy ácido, por lo que elimina cualquier bacteria, hongo u organismo que quiera hacer de la miel su hogar.
El efecto se logra gracias a la glucosa oxidasa, que es una enzima que producen las abejas y que en la miel se termina por descomponer como peróxido de hidrógeno, el cual es un antiséptico también conocido como agua oxigenada.
Mantener alimentos durante un tiempo determinado para economizar y llenar la alacena es una buena práctica que actualmente funciona muy bien. Sin embargo, se debe recordar que no todos los productos tienen esta capacidad de sobrevivir el paso del tiempo.
Se debe tener en cuenta también que es necesario almacenarlos de forma correcta para que de esa forma se pueda obtener un producto fresco, nutritivo y lleno de sabor después de un largo tiempo.
