Parece que al presidente Martín Vizcarra le fascinan las predicciones. En sus presentaciones televisivas intenta –entendemos-, elevar el ánimo de los peruanos entrados en pánico, anunciando que el Perú llegó a la meseta de contagios y que, por tanto, el facineroso y asesino coronavirus está controlado por las huestes sanitarias.
En tiempos de bombardeo informativo, el presidente no debe aventurarse a lanzar vaticinios de esa naturaleza sobre el Covid-19, pues las cifras reales ipso facto explotan en su rostro, como ocurrió
el 26 y 27 de mayo, tras anunciar que estamos ya en la meseta, nos cayó una cifra nunca antes registradas de contagios y muertos en el país.
Si no creemos en información de instituciones nacionales, están también los datos que monitorean los organismos internacionales como la OPS, OMS y hasta medios de comunicación como el Financial Time o New York Time, cuyas cifras difieren enormemente con los anuncios que le dan a Vizcarra. De lo que sí estamos seguro es que vamos en camino, pero aún no llegamos a la meseta; la jefa del comando Covid, Pilar Mazzetti, es más audaz al afirma que lo peor está por llegar.