Hace casi de 2 meses, el Ejecutivo anunció el acuerdo de Gobierno a Gobierno (G2G), suscrito con el Reino Unido, para reparar la infraestructura dañada por el FEN 2017. Será el Reino Unido, a través de un consorcio formado con empresas británicas, quien asesore, gestione e impulse junto con la Autoridad para la Reconstrucción Con Cambios (ARCC) más de 100 proyectos en norte del país, tales como, construcción de hospitales, escuelas, canalización y tratamiento integral de cursos de agua para eliminar el riesgo de desbordes, etc. ¿Ha sido acertado que el Gobierno decida por esta modalidad? ¿Qué beneficios traerá ?
Sabemos de las falencias de la contratación pública en nuestro país: corrupción, procedimientos lentos, postores poco competitivos, falta de estandarización, de capacidad en gestión, poca exigencia por parte del Estado, entre otros, son los que abundan en nuestro panorama actual, que impiden que el Estado cumpla eficientemente con su finalidad.
Frente a esto, el acuerdo G2G se presenta como una modalidad de contratación alternativa que proporciona un nuevo esquema de gestión para impulsar la ejecución de grandes proyectos, donde un Estado contrata bienes, servicios u obras que serán prestados por otro Estado conforme a los mecanismos y condiciones pactadas entre éstos. El acuerdo permitirá al Estado contratante proveerse de servicios de asistencia técnica internacional y el servicio de procura, es decir, la organización y desarrollo de procesos de selección para elegir a los proveedores que tendrán a cargo la elaboración de estudios definitivos de ingeniería, la construcción y equipamiento de obras, de ser el caso. Sin embargo, no debemos olvidar que estos mecanismos son figuras excepcionales que deberán emplearse cuando resulten necesarios. Sin duda, los Juegos Panamericanos Lima 2019 y la Reconstrucción del Norte han sido proyectos sumamente importantes para el país, de modo que resulta prudente su empleo.
Para el Perú, tanto el aprovechamiento de la experiencia del estado contratista, el know how, la economía en escala, el acceso a proveedores internacionales en condiciones paritarias, el destaque de profesionales experimentados como el uso de procedimientos de selección más transparentes y ágiles, son algunos de los beneficios que trae este acuerdo, además de un plan de capacitación en beneficio para el personal de las entidades públicas peruanas que participan en estos proyectos.