La aprobación -en comisión-, de la devolución de hasta el 100% de aportes a la ONP para amortiguar la pandemia en muchas familias, ha generado expectativa entre los miles de aportantes.
La propuesta sin embargo, aún debe aprobarse en el pleno y llegar al Ejecutivo, con lo cual no todo está dicho.
Lo preocupante, sin embargo, es el debilitamiento económico que sufrirá la ONP tras los retiros y sobre todo, la dramática caída de aportación de este año.
Si se aprobara el retiro, el Estado deberá sacar dinero de debajo de las piedras para cumplir con los pagos; pues este año la recaudación por aportes caería hasta en 32% debido a la pérdida de empleos o el cierre de empresas. La recaudación el año pasado por aportes fue de 4.069 millones; para este año se estima que llegue solo a 2.771 millones; 32% menos.
Con estos aportes no se logrará cubrir la planilla de pago de los pensionistas, considerando que la ONP ya está siendo subvencionada por el Estado desde el 2010 y cuenta con un déficit, hasta el año pasado, de 138.500 millones.
Si en los siguientes meses se le debe agregar la devolución que apruebe el Congreso, la ONP pasará apuros para conseguir dinero.