Publicidad

Hola, Buenos Días: La historia final de un parrandero

Alejandro Toledo llegó este domingo 23 de abril después de ser extraditado por Estados Unidos, donde estuvo seis años evadiendo la justicia peruana.

Hola, Buenos Días: La historia final de un  parrandero
La historia final de un parrandero
Tiempo de lectura: 2 minuto(s) aprox.

El caso Alejandro Toledo y su extradición melodramática que ha impreso el propio chacano desde su detención, es un ejemplo de como terminan los personajes mitómanos y embusteros como él, cuando hacen uso y abuso de las instituciones del Estado. Su historia es el corolario de una nefasta red de sobornos escandalosos con la empresa más corrupta de Latinoamérica: Odebrecht.

El Cholo sano y sagrado se vendió como un luchador de la corrupción (la marcha de los Cuatro Suyos); pero solo fue teatro porque detrás del telón se escondía un personaje sin escrúpulos, aficionado al trago y la parranda que le gustaba el poder y el dinero.

PUEDES LEER ► Fiscalía solicita que Waisman y Bruce sean interrogados

No fue un político con convicciones, simplemente un granuja como lo define el escritor, Umberto Jara.

Y con él suman como infausto récord Guinness, tres presidentes en prisión; uno con arresto domiciliario (PPK, liberado) y otro más como aspirante a una celda en Barbadillo: Ollanta Humala. ¿Por qué los peruanos casi siempre elegimos a los peores y más ineptos personajes para gobernar? ¿Será que somos demasiado candorosos y confiados... o los pretendientes al gobierno demasiado persuasivos y mentirosos?

Síguenos: