Es el título de un libro que leía un amigo recién casado, el día en que lo fui a visitar. Tras 50 años de matrimonio, me siento autorizado para dar testimonio de mi experiencia y algunos consejos para los matrimonios jóvenes..
El matrimonio es un contrato firmado ante la ley y en muchos casos ante el altar de Dios, en que una pareja se compromete libremente a formar una familia para toda la vida, basados en su vivencia como enamorados y novios, que los induce a creer que unidos serán felices.
Es una decisión para el resto de la vida y tiene que ser tomada en forma responsable, en que ambas partes tengan claro que no todo será color de rosa, sino que más bien cada uno tiene mucho que aportar en la consolidación de su objetivo: ¡una familia feliz!
El matrimonio es el arte de soportarse mutuamente, donde soportarse tiene dos significados simultáneos: En primer lugar, Apoyarse y en segundo lugar Aguantarse, porque como no somos perfectos, tenemos diferencias en carácter y costumbres, a las que tenemos que saber adaptarnos y buscar superarlas mediante la comprensión y el diálogo en vez de agudizarlas, que es el origen de las desavenencias cada vez mayores, que terminan en la separación y el divorcio.
No es lo mismo recibir algo de tu pareja ofrecido con cariño que recibirlo ofrecido de mala manera: Allí ocurre una innecesaria pérdida de valor, para ambos. Desconocer que estamos sujetos a limitaciones, da como resultado desavenencias que pueden ser evitadas.
Como persona, cada uno tiene su propio espacio, gustos y preferencias, que tienen que ser respetados por la otra parte sin interferencias, salvo que atenten contra la estabilidad de la familia.
La vida matrimonial entonces es algo que marido y mujer van forjando diariamente, superando las incontables peripecias de la vida, pandemia incluida, acompañándose solidariamente, para actuar como una sola unidad en el cuidado y protección de los hijos, compartiendo penas, viajes y alegrías como una sola familia.
Agradezco a Dios haberme permitido junto a Sofía Inés, llegar a nuestras Bodas de Oro Matrimoniales.