Conforme pasan los días se incrementa el riesgo de que los piuranos nos volvamos a contagiar con la Eris o EG.5, la nueva variante de la COVID-19 que ya circula en Lima, donde oficialmente hay once casos. El clima no puede ser más apropiado para la propagación de este nuevo linaje, la población se ha confiado, no le da importancia a las normas de seguridad; en la región la vacunación sigue siendo muy baja y, por si fuera poco, a la Dirección Regional de Salud se le ocurrió no actualizar la información de la sala situacional.
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El Colegio Médico expresó su preocupación por las graves consecuencias que podría derivarse de esta omisión de la Diresa, la que inexplicablemente no actualiza la sala situacional del COVID-19 desde hace más de tres meses.
Lo más probable es que las autoridades ya tengan la información internamente, pero no se difunden para el dominio público, lo que impide adoptar medidas preventivas. Mientras en Lima se hace seguimiento a los casos detectados y el sector se ha propuesto la meta de vacunar a 3 millones de personas hasta el 31 de diciembre; en Piura, a pesar de ser una de las regiones más golpeadas por la pandemia y ahora más expuesta por la gran cantidad de vuelos hacia y desde Lima, se sigue actuando con evidente improvisación.
La preocupación del Colegio Médico es que la falta de informción puede ocasionar en la población un peligroso exceso de confianza con la situación de la COVID, lo que bien puede acelerar la propagación.
Los piuranos estamos esperando que Salud rompa su silencio e informe a la población cuál es su plan para hacer frente a esta nueva cepa de Ómicron que, según estimaciones de los especialistas, llegaría a Piura a fin de mes.
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Si bien no se ha demostrado que la EG.5 no tiene un alto grado de letalidad no significa que no pueda llegar a causar la muerte entre los grupos más vulnerables como los pacientes con comorbilidades y los de la tercerar edad.
Tampoco se debe perder de vista el riesgo de que los piuranos se contagien de COVID y dengue a la vez dado que sigue circulando debido al invierno cálido y a los problemas de desabastecimiento de agua.
Ante la urgencia de vacunar a la población, Minsa aprobó la norma para agilizar la vacunación segura, voluntaria y gratuita. ¿La Diresa qué está haciendo?
