Sorprende la cantidad de policías en actividad descubiertos mientras cometían diversas fechorías como extorsión, robo, narcotráfico o involucrados con organizaciones criminales.
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Hasta ahora son 15 los efectivos sorprendidos en actividades delictivas en lo que va del año, solo en Piura, a nivel nacional son decenas y van desde suboficiales hasta jefes policiales.
¿Cuántos efectivos más quedan y siguen con sus fechorías mientras visten el uniforme policial y tienen acceso a información confidencial? Se ha detectado que algunos incluso integran bandas criminales y son un peligro en las calles porque con el ropaje policial se aprovechan para hacer ‘reglaje’ a empresarios y filtrar información a las bandas (infidente).
Pero los malos policías no solo están en la calle, según el Centro de Estudios en Seguridad Ciudadana, la corrupción administrativa es otro eslabón que le hace mucho daño a la institución y que se traduce en pago de comisiones por contratos internos, desvíos de fondos, pago por ascensos o traslado (caso Pedro Castillo), entre otros. La institución policial es necesaria y útil, pero malos elementos la están destruyendo. Ojalá sigan limpiando la casa.
