Con el afecto y el agradecimiento en mí, escribo estas palabras en homenaje a nuestro obispo Daniel Turley Murphy OSA.
Allá por el año de 1964, nuestra cálida y generosa Chulucanas se privilegia con la llegada de los sacerdotes agustinos liderados por nuestro gran exobispo (+) Juan Conway Mcnabb y acompañados de las hermanas franciscanas María London, Juana Morris, Constansa Kevin y las hermanas maristas Tomasa (médico), Paula, Aaron, etc.
Después de 56 años de presencia agustiniana, el Alto Piura se regocija, celebra y pleno de agradecimiento expresa su reconocimiento a quien fue su segundo obispo, Monseñor Daniel.
Te vas jubilado. Cumpliste con creces tu gran misión de evangelizador. Tu mensaje, tu actitud, tu testimonio y tu compenetración de humildad, sencillez y santidad con nuestro pueblo católico y no católico, te identificó. En tu quehacer cotidiano pusiste en práctica el verdadero sentido del mensaje cristiano: la opción preferencial por los pobres y que en esta pandemia lo demostraste una vez más con tus programas de solidaridad, en la práctica, asistiendo con alimentación, oxígeno, etc., a los más necesitados.
Gracias, hermano Daniel, porque tu presencia nos condujo a comprender el mensaje de San Agustín cuando nos dice que “el conocimiento de la verdad ha de ser buscado no con fines meramente académicos, sino porque aporta la verdadera felicidad, la verdadera beatitud… Solamente el sabio puede ser feliz, y la sabiduría requiere el conocimiento de la verdad”. Gracias. La verdad nos hará libres.
Tu testimonio como pastor católico lo expresaste en el liderazgo que asumiste en la mesa de lucha contra la pobreza, en las diferentes mesas de diálogo, buscando la verdad para el tratamiento y solución de los problemas de tus hermanos alto piuranos. Tu liderazgo en la lucha por la ejecución de las obras del proyecto Alto Piura. En fin…
Escribo no para alabar a nadie; escribo por justicia. Gracias, Monseñor Daniel Turley Murphy. ¡Gracias! Y en la memoria de los pastores agustinos norteamericanos: Juan Conway Mcnabb, Juan Burkart, Gerardo Theis, hermano David Sharp, Ricardo Apici y los mexicanos José Gavidia (+), Pedro y Porfirio Díaz, ¡gracias! Y bienvenido, querido obispo designado, Monseñor Cristóbal Bernardo Mejía Corral. Bienvenido.