El ministro de Defensa, Jorge Chávez Cresta, aclaró que se quiere garantizar operaciones en lucha contra pandemia.

El intento del presidente del Congreso, Manuel Merino, de acercarse a los altos mandos de los institutos castrenses durante el primer intento de vacancia de Martín Vizcarra fue determinante a la hora que el presidente de la República debió renovar a la cúpula militar.

Precisamente, en lugar de reemplazar al jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, el general de división EP César Astudillo Salcedo, por haber cumplido su periodo de gestión, Vizcarra prefirió mantenerlo en la estratégica posición justo a pocas horas de que el Congreso decida si admite o no a debate la segunda moción de vacancia.

“Esta es una continuidad normal, desde hace dos años se ha producido el nombramiento de los comandantes generales, al término de los dos años, que se cumplían a fines de octubre, se ha producido a relevo de acuerdo a ley y en los plazos correspondientes”, explicó el ministro de Defensa, Jorge Chávez.

Asimismo, el titular del Ministerio de Defensa aclaró que la “prórroga excepcional” en el caso del general César Astudillo se debe a la necesidad de garantizar la coordinación y la continuidad de las articulaciones en la conducción de las operaciones de la lucha contra la pandemia.

Además, el ministro Jorge Chávez recordó que el presidente Martín Vizcarra y el premier Walter Martos han destacado que “las Fuerzas Fuerzas Armadas no son deliberantes”.

“Las Fuerzas Armadas se rigen en el orden constitucional y lo que se ha llevado a cabo (los nombramientos de nuevos comandantes) es el normal procedimiento que se lleva a cabo de acuerdo a ley y en los plazos establecidos”, manifestó.

Datos

* Destacado integrante del Comando Chavín de Huántar, en 2016 el expresidente Pedro Pablo Kuczynski lo pasó al retiro, pero el general Astudillo logró una reconsideración, continuó en actividad y fue designado por el propio Kuczynski comandante general del Ejército, en 2017.