Candidatos buscan ‘vientres de alquiler’ en su afán de intentar cumplir con el sueño presidencial. En seis días se vence el plazo para afiliarse a un partido.
Como ya ha ocurrido en años anteriores, la crisis y la falta de educación políticas hace que, a seis días de acabarse el plazo para inscribirse para participar a las elecciones 2021, aún tengamos candidatos sin partidos y partidos sin candidatos.
“‘Estoy aún en conversaciones, pronto les informaré’. Es una declaración de un futbolista, ante el inminente cierre del libro de pases de la temporada. Algo así está ocurriendo con candidatos a la presidencia”, indica el politólogo Fernando Tuesta.
El mejor postor
Durante la semana ya algunos posibles candidatos han oficializado su militancia, personajes mediáticos que no llevan una vida partidaria con las agrupaciones en las que se han inscrito, pero que, quizás, son el vehículo perfecto para llegar al poder. Y, obviamente, han sido muy bien recibidos por los partidos.
Poco importa compartir los mismos ideales y fortalecer la institucionalidad de las agrupaciones con tal de salvar el registro de la organización y, en el mejor de los casos, alcanzar el éxito electoral que les otorgue beneficios políticos. A esto Fernando Tuesta le llama: “juntarse el hambre y la necesidad”.
Un ejemplo claro es el del alcalde de La Victoria, George Forsyth, quien ha confirmado su inscripción de última hora en Restauración Nacional. Antes, sin embargo, ya había conversado con otras agrupaciones.
Ha dicho que no sabe si postulará, pero ya hay pintas con su nombre por varios lados. De ser el caso, Forsyth tendría que renunciar a la alcaldía seis meses antes de la elección del 11 de abril. Es decir, como máximo el 11 de octubre. No llegaría ni a los dos años de función. Así lo estipula el artículo 194 de la Constitución y la Ley 30305.
Un segundo caso es el de Fernando Cillóniz. Acaba también de inscribirse en Todos por el Perú (la misma agrupación que presentó la frustrada candidatura de Julio Guzmán en el 2016).
Datos
* Otra inscripción de última hora ha sido la del empresario minero Roque Benavides. En su caso procedió a inscribirse en un partido histórico aunque con un presente bastante complicado, como el APRA.
* El 30 de septiembre es el límite para afiliarse a un partido y así poder participar de las elecciones internas.
