El Instituto Nacional Penitenciario (INPE) inició un procedimiento administrativo disciplinario contra Betssy Chávez, ex primera ministra, luego de que se negara a ser trasladada desde el Penal Anexo Mujeres de Chorrillos al Penal Barbadillo, donde debía participar en una diligencia judicial por el caso del fallido golpe de Estado del 7 de diciembre de 2022.
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Según el comunicado oficial, la mañana del lunes 15 de julio, Chávez fue evaluada en el tópico del penal como parte del protocolo previo a su traslado. No obstante, al llegar a la puerta del establecimiento penitenciario, se negó a salir, indicando su decisión de iniciar una huelga de hambre en protesta por presuntos tratos hostiles por parte de las autoridades del penal. Esta negativa, de acuerdo con el artículo 28 del Código de Ejecución Penal, constituye una falta grave.
El INPE también informó que, en respuesta a las acusaciones de maltrato por parte de Chávez, su Oficina de Asuntos Internos se trasladó al penal para realizar las investigaciones preliminares. Además, el organismo penitenciario señaló que la interna ya tiene programada una atención médica especializada en gastroenterología, tras una evaluación de la Junta Médica Penitenciaria el pasado 11 de julio.
Betssy Chávez cumple prisión preventiva por los presuntos delitos de rebelión y conspiración. Desde su reclusión, ha denunciado actos de abuso de autoridad, amenazas y restricciones en sus condiciones de vida, incluyendo limitaciones para usar los servicios higiénicos y recibir visitas. El INPE reiteró su compromiso con el respeto a los derechos humanos y el mantenimiento del orden en los centros penitenciarios.
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