El reciente hackeo a la Dirección de Inteligencia de la Policía Nacional del Perú (DIRIN) ha expuesto datos sensibles, generando alarma sobre la vulnerabilidad de los sistemas de ciberseguridad estatales. El grupo Deface Perú se atribuyó el ataque, filtrando miles de documentos en Telegram, incluyendo identidades de agentes, planes operativos y seguimientos a periodistas y activistas.
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¿Qué información se filtró en el hackeo a la DIRIN?
La filtración, conocida como Dirin Leaks, incluye información crítica recopilada entre 2023 y 2025. Entre los datos expuestos están:
- Identidades de agentes: Aproximadamente 1,500 nombres, apellidos y DNI de agentes de inteligencia, incluyendo al director, general Augusto Ríos Tiravanti.
- Planes operativos: Informes sobre operaciones contra el narcoterrorismo, minería ilegal y crimen organizado en zonas como el VRAEM.
- Seguimientos: Reportes de vigilancia a manifestaciones antigubernamentales, periodistas, activistas y medios, como el semanario Hildebrandt en sus trece.
- Tutoriales de SERPOL: Videos que explican el uso del sistema SERPOL, una herramienta de inteligencia que proporciona datos en tiempo real sobre antecedentes policiales, fiscales y judiciales.
El Ministerio del Interior (Mininter) confirmó el ataque y activó un plan de contingencia, suspendiendo los servicios comprometidos. La Dirección de Ciberdelincuencia investiga para identificar a los responsables.
¿Quiénes son Deface Perú y qué buscan?
Deface Perú es un grupo de hacktivistas conocido por atacar entidades gubernamentales y corporativas para exponer sus debilidades. En su comunicado, se burlaron de la ciberseguridad de la PNP, afirmando que el sistema es frágil pese a inversiones millonarias en un nuevo centro de datos. Advirtieron que su próximo objetivo será la Dirección Nacional de Inteligencia (DINI), lo que eleva las preocupaciones sobre la seguridad nacional.
¿Qué riesgos implica esta filtración para la PNP?
Según el exjefe de la DIRIN, general Mauricio Quiroga, la exposición de datos clasificados otorga una ventaja a las organizaciones criminales, ya que revela métodos y estrategias de inteligencia. Por ejemplo, los documentos incluyen reportes de agentes encubiertos en el VRAEM, detallando movimientos de narcoterroristas liderados por Víctor Quispe Palomino, alias “José”. Si esta información llega a manos de grupos criminales, la vida de los agentes podría estar en peligro.
El exministro Carlos Morán calificó el incidente como “devastador”, destacando que los datos filtrados incluyen planes de seguridad para la presidenta Dina Boluarte y exmandatarios, así como seguimientos a jueces, fiscales y periodistas vinculados a casos como Odebrecht. Esto podría evidenciar un uso indebido de recursos de inteligencia para fines políticos.
¿Qué medidas está tomando la PNP tras el hackeo?
El Mininter informó que la Dirección de Tecnologías de la Información y Comunicaciones implementó medidas de contención. Sin embargo, el comandante general Víctor Zanabria sugirió que la filtración podría provenir de un efectivo policial con acceso al sistema, no necesariamente de un hackeo externo. Esto ha generado dudas sobre la ciberseguridad interna de la institución.











