El Congreso de la República ha solicitado una investigación contra el alcalde de Lima, Rafael López Aliaga, por presuntas irregularidades en el proyecto del tren Lima–Chosica. El congresista Pasión Dávila presentó un oficio a la fiscal de la Nación, Delia Espinoza, exigiendo una indagación preliminar por posibles delitos de fraude aduanero, ocultamiento de pagos y sobrevaloración en la adquisición de material ferroviario.
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¿Qué irregularidades se investigan en el proyecto del tren Lima–Chosica?
El parlamentario Pasión Dávila denunció que la Municipalidad Metropolitana de Lima (MML), liderada por Rafael López Aliaga, presentó la adquisición de 90 vagones, 19 locomotoras y repuestos como una donación de la empresa estadounidense Caltrain. Sin embargo, documentos oficiales de la compañía revelarían que la operación fue una venta por 4.9 millones de dólares, mientras que la MML la registró con un valor de 822 millones de soles (aproximadamente 224 millones de dólares). Esta discrepancia ha generado sospechas de sobrevaloración injustificada y posibles pagos no declarados.
¿Por qué se habla de fraude aduanero en el tren Lima–Chosica?
La denuncia señala que la operación se presentó ante la Superintendencia Nacional de Aduanas (SUNAT) como una donación, pero la documentación de Caltrain indica una compraventa. Según Dávila, esto podría configurar delitos como defraudación de rentas aduaneras, malversación de fondos, colusión y falsedad ideológica. Además, el exministro Rafael Rey afirmó que se habría realizado una transferencia de más de siete millones de dólares, contradiciendo la versión oficial de la municipalidad.
¿Qué pide el Congreso para el caso?
El congresista instó a las autoridades a tomar medidas concretas para esclarecer los hechos:
- Que SUNAT entregue el expediente completo de la operación.
- Que la MML remita toda la documentación relacionada con el proyecto.
- Que se solicite información oficial a Caltrain a través de autoridades estadounidenses.
- Que se cite a declarar a Rafael López Aliaga y a los funcionarios municipales involucrados.
Dávila subrayó la gravedad de los hechos, que podrían implicar un perjuicio económico millonario al Estado y una violación de la normativa aduanera y de contrataciones públicas.
¿Cómo respondió Rafael López Aliaga a las acusaciones?
El alcalde de Lima no se ha quedado callado. Durante la presentación del material ferroviario a mediados de julio, anunció que enfrenta denuncias penales por el proyecto, pero aseguró que estas no le afectan. “Ya estoy curtido, tengo cuero de chancho, me resbala”, declaró. Además, dejó abierta la posibilidad de iniciar acciones legales contra Pasión Dávila, exigiendo que el congresista pruebe sus acusaciones. “Tener boca no significa hablar”, expresó, sin ofrecer mayores detalles sobre su defensa.
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