Conmovidos y con lágrimas en los ojos al contemplar a la Virgen de Chapi, miles de peregrinos participaron de la misa central y la tradicional procesión en honor a la Mamita de Chapi, cuya festividad se celebra cada 1 de mayo.
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Muchos de los devotos llegan hasta Chapi caminando, ya sea para agradecer un milagro recibido o para cumplir una promesa. Sin importar el intenso frío o las largas horas de recorrido, los fieles procedentes de distintas regiones del país e incluso del extranjero se congregan en su Santuario para rendirle homenaje. Se estima que alrededor de 200 mil peregrinos visitan el Santuario entre el 30 de abril y el 1 de mayo, jornadas en las que se celebran misas durante todo el día para acoger a los visitantes.
La misa principal se llevó a cabo a las 11:00 de la mañana en la explanada del Santuario y fue presidida por monseñor Raúl Chau, Obispo Auxiliar, acompañado por sacerdotes de la Arquidiócesis de Arequipa, quienes concelebraron la ceremonia.
Al finalizar la eucaristía, la imagen de la Virgen de Chapi recorrió en procesión la explanada, derramando bendiciones sobre los fieles que aguardaban emocionados acercarse a la Mamita.
Posteriormente, a las 3:00 de la tarde, se celebró la misa de despedida y, a las 4:30 p.m., se realizó la emotiva procesión de retorno de la Patrona de Arequipa a su templo.
Así, los peregrinos se despiden de la Mamita de Chapi hasta el próximo año, llevándose en el corazón la gratitud por las bendiciones recibidas y la promesa de volver a su encuentro.
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