Un grave hecho delictivo alertó a la provincia de Talara, luego de que un grupo de cuatro delincuentes encapuchados ingresara al almacén de Toyota y redujera violentamente a los vigilantes para luego provocar un incendio que, según las primeras hipótesis policiales, sería un acto de extorsión dirigido a la empresa.
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El ataque ocurrió alrededor de las 04:00 a. m. en una zona colindante con el asentamiento Sol de Oro, área considerada vulnerable debido a su cercanía con el cerro. Los sujetos habrían aprovechado esta ruta para ingresar y posteriormente escapar sin ser detectados.
Serenazgo y bomberos lograron controlar el fuego
Tras recibir la alerta, el personal de Serenazgo de la Municipalidad Provincial de Talara, liderado por el comandante (r) Luciano Arévalo Guerra, fue el primero en llegar al lugar. Al ingresar, comprobaron que el fuego provenía del interior del almacén, por lo que solicitaron apoyo de la Compañía de Bomberos.
El equipo de emergencia —a bordo de la unidad CBP-1578 y dirigido por el teniente Iván Vaca Gutiérrez— actuó rápidamente para controlar las llamas, evitando que el incendio se extendiera y causara daños mayores a la infraestructura y a los vehículos almacenados.
Vigilantes fueron golpeados, amarrados y robados
Los trabajadores de seguridad, Miguel Mogollón Vilela (45) y Enrique Henry Castillo Benites (49), relataron que los delincuentes llegaron armados, los encañonaron y los golpearon brutalmente antes de amarrarlos para dejarlos inmovilizados. Además, les robaron sus teléfonos celulares.
Según el testimonio de las víctimas, los atacantes rociaron kerosene en varios puntos del almacén y luego prendieron fuego, huyendo rápidamente por la zona donde ingresaron.
Policía investiga posible participación de una mafia extorsiva
La jefa de Servicios de Toyota acudió al lugar para verificar los daños y coordinar con las autoridades. Agentes de la PNP iniciaron las diligencias correspondientes y manejan como principal hipótesis que se trataría de un ataque planificado por una mafia extorsiva que estaría operando en la provincia.
Este nuevo episodio vuelve a evidenciar el avance del crimen organizado en el norte del país y la urgente necesidad de reforzar la seguridad en zonas industriales y accesos vulnerables de Talara.
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