Aproximadamente, 270 trabajadores de la Municipalidad de Sullana no pudieron retornar a sus actividades; porque la entidad aún no les ha aplicado pruebas rápida para el descarte del COVID-19. Tampoco se ha garantizado la entrega de insumos de limpieza y las condiciones necesarias para el desempeño laboral.
De ese total de trabajadores, entre nombrados y de planta afiliados al Sitramun, el 40% está considerado como población vulnerable. Según el dirigente, Patow Vinces, no volverán a las actividades presenciales hasta que la entidad edil garantice el cumplimiento del protocolo establecido por el Ministerio de Salud.
“Nuestro regreso depende las garantías de salubridad que nos den. Esto no pasa por culpa del trabajador, sino por la entidad. Hay un protocolo estricto que hay que cumplir. Además, la pandemia está en etapa de recrudecer y no podemos permitir que los trabajadores vuelvan sin las condiciones dadas”, expresó.
Asimismo, dijo que la Municipalidad de Sullana tiene dos semanas para hacer reajustes, aplicar las pruebas rápidas y definir quiénes vuelven a laborar a partir del 1 de setiembre. “De no cumplir, vamos a seguir en suspensión”, señaló.