El jefe de la Región Policial Piura, general PNP Manuel Farías, alertó que parte de la actividad delictiva que operaba en la provincia de Pataz, en La Libertad, se ha trasladado hacia Piura, incrementando la presencia de criminalidad organizada en esta zona del norte del país.
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En declaraciones a RPP, el alto mando policial explicó que Piura enfrenta el avance de la delincuencia transnacional, situación que motivó al Gobierno de José Jerí a declarar el estado de emergencia por un periodo de 60 días en diversas localidades de la región. La medida alcanza a las provincias de Piura, Sullana, Paita y Talara, con especial énfasis en los distritos que registran mayor incidencia delictiva, como Piura, Castilla, Catacaos, Veintiséis de Octubre, Sullana, Bellavista y Talara.
Durante el programa La Rotativa del Aire, Farías subrayó que Piura, por su condición de región fronteriza con Ecuador, se ha convertido en un punto estratégico para organizaciones criminales extranjeras. Entre ellas mencionó a bandas como ‘Los Choneros’, ‘Los Lobos’, ‘Los Tiguerones’ y ‘Los Lagartos’, las cuales, según información de inteligencia policial, mantienen vínculos con ‘Los Pulpos’ de Trujillo.
El general precisó que, tras la declaratoria de estados de emergencia en Pataz —zona afectada por la minería ilegal y el accionar de grupos criminales—, muchas de estas actividades ilícitas se han desplazado hacia Piura y áreas cercanas a la frontera. Indicó que esta situación fue evaluada junto a autoridades locales y nacionales durante la visita del presidente, lo que llevó a tomar la decisión de imponer el régimen de excepción.
Asimismo, Farías confirmó la presencia de delincuencia transnacional en la región y señaló que la Policía ha logrado capturas de integrantes de organizaciones como el Tren de Aragua. En cuanto a la lucha contra la extorsión, destacó que las denuncias diarias se redujeron de doce a solo dos luego del traslado de internos del penal de Río Seco, quienes estaban implicados en llamadas extorsivas.
Detalló que, en coordinación con el Ministerio de Justicia, inicialmente se trasladó a 50 internos y posteriormente a otros 22 a distintos centros penitenciarios, como parte de la estrategia para frenar este delito. Sin embargo, advirtió sobre un “efecto globo”, ya que las extorsiones ahora se realizan desde otros penales del país o incluso desde personas que se encuentran en libertad.
Finalmente, el jefe policial señaló que si bien la extorsión ha disminuido de manera significativa en la ciudad de Piura, el fenómeno se ha desplazado a otros puntos, lo que obliga a mantener y reforzar las acciones de inteligencia y control a nivel nacional.
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