En el asentamiento 31 de Enero, ubicado en el distrito Veintiséis de Octubre, los vecinos enfrentan una grave situación debido a un colapso de desagüe que ha dejado aguas servidas acumuladas en las calles Los Nogales y Ébanos. Este problema, que persiste desde hace más de 10 días, genera olores desagradables, contaminación y dificultades para la movilidad de los residentes.
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¿Por qué no se ha resuelto el colapso de desagüe en 31 de Enero?
Según Nélida Peña, integrante de la Junta Vecinal Comunal (Juveco), los moradores han realizado las gestiones necesarias ante la EPS Grau, incluyendo el llenado de formularios solicitados por la entidad. Sin embargo, la respuesta de la empresa ha sido insuficiente, limitándose a indicar que el proceso «puede demorar». Esta demora agrava las condiciones de vida de los habitantes, quienes conviven con una pestilencia que afecta su salud y bienestar.
¿Cómo afecta el colapso de desagüe a los vecinos de Veintiséis de Octubre?
El colapso de desagüe ha generado una laguna de aguas estancadas, lo que obliga a los vehículos, incluidas motocicletas, a transitar por las veredas, poniendo en riesgo la seguridad de los peatones. Magali Rivera, una de las afectadas, expresó su preocupación: «Hemos llamado a la EPS Grau, pero solo nos dicen que vendrán pronto. Seguimos esperando, y la pestilencia es insoportable». Este problema no solo afecta la transitabilidad, sino que también representa un riesgo para la salud pública debido a la contaminación del entorno.
¿Qué medidas han tomado los vecinos frente a la inacción de las autoridades?
Los residentes del asentamiento 31 de Enero han exigido una intervención urgente al buzón principal para solucionar el problema. La comunidad ha elevado sus quejas a la EPS Grau, solicitando una respuesta inmediata para evitar los olores nauseabundos y la vista contaminada que enfrentan diariamente. A pesar de estas acciones, la falta de atención por parte de las autoridades ha generado un sentimiento de abandono entre los moradores.
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