En una conferencia de prensa, el Dr. César Guerrero, infectólogo de la Dirección Regional de Salud (Diresa) Piura, confirmó el fallecimiento de una persona a causa de leptospirosis, también conocida como tifus de perro, durante el presente año 2025. La autoridad sanitaria advirtió a la población sobre la importancia de mantener la prevención ante esta enfermedad infecciosa, la cual puede transmitirse de animales a humanos.
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¿Qué es la leptospirosis y cómo se transmite?
La leptospirosis es una enfermedad causada por una bacteria del género Leptospira, presente comúnmente en la orina de animales domésticos o de granja, como perros, cerdos y caballos. Según explicó el Dr. Guerrero, el contagio se produce cuando una persona entra en contacto con agua, tierra o alimentos contaminados con la orina de un animal infectado.
“Esta bacteria puede ingresar al cuerpo humano a través de heridas en la piel o mucosas, afectando órganos vitales como el hígado y los riñones si no se trata a tiempo”, señaló el especialista.
Situación en Piura durante 2025
El infectólogo informó que este primer deceso del año por leptospirosis ha encendido las alertas en la región norteña. Durante el año 2024, no se registraron muertes asociadas a esta enfermedad, aunque sí se reportaron algunos casos leves.
Guerrero indicó que, pese a la preocupación, no se ha previsto una campaña de vacunación masiva por el momento. Sin embargo, instó a los municipios y centros de salud a mantener la vigilancia epidemiológica y fortalecer las acciones preventivas en coordinación con la Diresa.
Prevención y cuidados recomendados
El especialista enfatizó que la prevención es la principal herramienta para evitar nuevos contagios. Recomendó a la ciudadanía realizar vacunaciones anuales a sus mascotas, mantener la limpieza constante en patios y áreas donde transiten animales, y evitar el contacto con agua estancada que pueda estar contaminada.
Asimismo, recordó que el consumo de alimentos correctamente lavados y el uso de calzado al caminar por zonas húmedas o con barro son medidas básicas para reducir el riesgo.
“Es fundamental que la población adopte hábitos de higiene responsables. No solo se trata de proteger a los animales, sino de evitar que se conviertan en portadores de bacterias que pongan en riesgo la salud pública”, puntualizó Guerrero.











