El sector agrícola en Piura es un pilar económico fundamental, pero enfrenta desafíos como la alta informalidad laboral y la falta de infraestructura adecuada.
PUEDES LEER ►Piura: Retraso en la obra de reconstrucción de la avenida Sullana genera protestas
¿Por qué es importante el sector agrícola en Piura?
El agro representa el 9.6% del PBI regional en Piura y genera 318 mil empleos, equivalente al 29.3% del total de puestos de trabajo en la región. Cultivos como la caña de azúcar, la uva y el arroz son clave para la economía local. En 2024, el sector agropecuario creció un 9.8%, recuperándose de una contracción del 10.6% en 2023 causada por factores climáticos adversos. En el primer trimestre de 2025, el crecimiento alcanzó un impresionante 22.7%, impulsado por mayores siembras que sumaron 113.2 mil hectáreas, un 3.7% más que el promedio de las seis campañas anteriores.
A pesar de una ligera caída del 5% en abril de 2025, debido a una menor producción de plátano y limón, las perspectivas para el sector siguen siendo positivas. Sin embargo, los trabajadores agrícolas enfrentan condiciones laborales que limitan el desarrollo pleno del sector.
¿Cómo ha impactado el crecimiento agrícola en la pobreza?
El aumento en la producción agrícola ha tenido un impacto directo en la reducción de la pobreza en Piura. Entre 2004 y 2024, la pobreza en hogares agrícolas disminuyó de 90.2% a 43.1%, en línea con un incremento del 80% en la producción agrícola. Este avance refleja cómo el fortalecimiento del sector agrícola mejora las condiciones de vida de las familias piuranas.
En 2024, los 12 departamentos con mayor crecimiento agrícola, incluido Piura, registraron una disminución notable de la pobreza. Sin embargo, los niveles de pobreza aún superan los registrados antes de la pandemia, lo que indica que hay retos pendientes.
¿Qué desafíos enfrentan los trabajadores agrícolas en Piura?
Alta informalidad laboral en el agro
La informalidad laboral es uno de los principales obstáculos para el desarrollo del agro en Piura. Según datos de 2024, el 85.7% de los trabajadores agrícolas en la región son informales, una cifra elevada aunque menor que el promedio nacional del 95% para el sector. Esta situación se ve agravada por regulaciones como el Bono Beta, implementado en 2021, que eleva el salario mínimo en el agro un 30% por encima de otros sectores, desincentivando la formalización.
Infraestructura de riego insuficiente
Otro desafío clave es la falta de infraestructura de riego. El Proyecto Poechos, que irriga más de 100 mil hectáreas, opera a un tercio de su capacidad debido a la acumulación de sedimentos y falta de mantenimiento. Por otro lado, el Proyecto Alto Piura, que podría incorporar 19 mil hectáreas y generar 100 mil empleos, lleva paralizado cinco años, aunque se espera su reactivación en 2026. Completar estos proyectos podría cuadruplicar el área bajo riego tecnificado, actualmente en 36 mil hectáreas.











