Los dirigentes del gremio de pescadores de la caleta Cabo Blanco aseguran que el retraso de los trabajos de remodelación en el Desembarcadero Pesquero Artesanal (DPA) afecta a los pescadores de la zona.
«Son 500 pescadores legalmente formalizados que, al dejar pasar la buena temporada de captura de diversos productos como el calamar gigante, cabrillón y jurel, están dejando de laborar y perdiendo económicamente».
“No hay dónde desembarcar, faltan trabajos portuarios en el cabezo de muelle plataforma baja”, acotaron.
Refieren que han informado a Fondepes de una serie de observaciones, entre ellas que en el área de embarque y desembarque constantemente se exponen a accidentes; sin embargo, no les hacen caso.
La ejecución de la obra está a cargo de Ahren Contratistas Generales S.A.C.