Para los especialistas, una gran cantidad de partidos son difíciles de catalogar, pues varían dependiendo de cada campaña electoral.

La campaña de las elecciones del Bicentenario se inició a finales del año pasado con 23 listas de candidatos presidenciales. Pero poco a poco el panorama político se va aclarando, entre las resoluciones del Jurado Nacional de Elecciones (JNE) y las propias pugnas internas de las organizaciones.

Sin duda alguna, nuestro país es impredecible al momento de sufragar y también sabemos que aún nos falta un largo camino para crear una verdadera cultura política.

Ante ello, hemos anexado un cuadro con las inclinaciones políticas de cada agrupación (izquierda, derecha, centro, inclasificables), de tal manera que el elector tenga en consideración cuál se ajusta más a sus ideales.

“Algunos partidos se autoclasifican en algún espectro, pero buscan atraer electores y terminan por volverse ambiguos. Combinan posiciones, en temas sociales se acercan a la izquierda; en lo económico, a la derecha. Se mueven más por estrategias de campañas, lo cual genera confusión sobre su posición y no tienen ideas claras”, opinó el secretario de Transparencia, Iván Lanegra.

Enfatizó que la renovación es buena, pero no cuando esta se da con cada proceso electoral, pues “no son partidos políticos en el sentido estricto, sino que se orientan a ganar votos”. Además, consideró que parte del problema es que los planes de gobierno son elaborados por profesionales que bien podrían aportar a cualquier partido y que solo se orientan a resolver problemas coyunturales, mas no plasman del todo la ideología del partido.

Por su parte, el analista político, Gerardo Távara, opinó que “no tenemos partidos con ideologías propiamente dichas”, aunque se entiende que los grupos que, por ejemplo, insisten en una mayor intervención del Estado en la actividad económica son más de izquierda; mientras que, por ejemplo, los que quieren mayor protección de las actividades extractivas se catalogarían como derecha.

“Luego hay otros de centro que combinan posiciones, pero hay otros que uno no sabe bien qué son porque corren de un lugar a otro, son más de corte populista o autoritario, como Podemos o el etnocacerismo, y otros que solo funcionan como vientres de alquiler y no les importa la posición política del candidato”, añadió.

Mientras que para el experto en elecciones, Oscar Tuesta, los partidos no tienen ya credibilidad: “Alan García, en su segundo periodo, dio un discurso más de izquierda, pero gobernó como derecha. Pienso que el partido que te ofrece cambiar la Constitución es de izquierda, aunque Yonhy Lescano se acomoda según las preferencias. La clasificación no es fácil porque muchos partidos son nuevos y van cambiando según las tendencias electorales”.
en carrera electoral

Aunque la mayoría de partidos han logrado ya su inscripción, las planchas presidenciales de Podemos Perú y Victoria Nacional corren el riesgo de ser excluidas.

Como sabemos, las reglas del juego han cambiado y, en estas elecciones, las agrupaciones no solo se disputan un cargo público, sino su permanencia en el Registro de Organizaciones Políticas (ROP).

¿Quiénes están en riesgo de desaparecer? Contigo y Todos Por el Perú tuvieron diferencias internas y las postulaciones se vinieron abajo. El Frente Esperanza y Perú Nación no se inscribieron a tiempo como partidos.

¿Y sobre el APRA y el Frepap? Esta agrupación retiró la candidatura de Nidia Vilchez, pese a que ya estaba en carrera, y no inscribió todas sus listas parlamentarias; mientras que el “pescadito” solo lleva postulantes al Congreso.

En el espectro

Partidos de derecha: Tienden a ser conservadores en lo político, aunque quizá liberales en lo económico. Tienen una visión de los derechos humanos un poco más restrictiva.

Partidos de izquierda: Creen, más bien, en la participación del Estado en los medios de producción. Creen en la regulación fuerte del Estado y, en algunos casos, quieren ampliar la oferta de derechos humanos.

Partidos de centro: Se consideran como un intermedio o como un árbitro de posiciones antagónicas tanto de derecha como de izquierda. Adoptan posturas de ambas ideologías.

Partidos inclasificables: Son partidos de caudillos y cambian con cada elección, o quizá se mantienen en una lógica populista y clientelista. Pueden tener severas disputas ideológicas internas.

Por. Andrea Flores Khalil / Agencias