Debido a la paralización de proyectos importantes para la región -como el Peihap-, el Consejo Regional pidió que estas obras cambien de unidad ejecutora. ¿Es esto conveniente y factible o a qué otras alternativas se podría recurrir?
El decano del Colegio de Ingenieros, Manuel Asmat, aseguró que el cambio de unidad ejecutora siempre es una alternativa, sobre todo ahora que el Gobierno Regional ha demostrado su poca capacidad de gestión.
“Es mejor ejecutarlos a nivel regional, pero allí el GORE necesitaría un área encargada de gestionar los proyectos. Desconocemos si ya hay intención de implementarla. Mientras esto no se tenga, los proyectos seguirán trabados”, explicó.
Agregó que otra salida al entrampamiento sería la ejecución de proyectos bajo la modalidad de obras por impuestos, la cual ya ha demostrado efectividad.
“Quizá una mejor opción sea el de obras por impuestos, a través del sector privado, en algunos proyectos emblemáticos y que generen mayores beneficios a la población. Por ejemplo, esto funcionaría muy bien en carreteras o en centros de salud como el de Máncora”, sugirió.
Por su parte, el exgobernador Javier Atkins insistió en que cada proyecto es distinto, por lo cual habría que estudiar cada caso en específico. “La exigecia de los ciudadanos es muy grande, pero la normatividad no ayuda. Las obras por impuestos ya se ha hecho antes en, por ejemplo, la avenida Vice y la Sánchez Cerro; es un buen mecanismo a utilizar en obras futuras y no seguir todo el engorroso proceso de la Ley de Contrataciones”.
El exdecano del Colegio de Abogados, Manuel Palacios, dijo que “cambiar de unidad ejecutora no es tan fácil por el tema contractual, y cambiar de modalidad a obras por impuestos es aún más difícil. Habría que estudiar cada caso en particular para ver qué se puede hacer”.
Opiniones
Manuel Asmat: “La modalidad de obras por impuestos se podría trabajar con las empresas mineras”.
Javier Atkins: “La engorrosa Ley de Contrataciones no ayuda a agilizar la ejecución de obras”.
Manuel Palacios: “Muchas obras están paralizadas por un tema contractual”.
Por Andrea Flores Khalil