Un grupo de combis y automóviles de servicio público, que desafiando la pandemia del COVID-19 circulaban sin cumplir con los protocolos de bioseguridad.
Las unidades de transporte fueron intervenidas en un sorpresivo operativo ejecutado por inspectores de la Unidad de Tránsito de la comuna local, con apoyo de policías y serenos.
Asimismo, se intervinieron a 20 mototaxis cuyos conductores no tenían la documentación en regla, se les aplicó las respectivas multas.
Durante el operativo fueron intervenidas tres camionetas rurales (combis) y cinco autos colectivos que circulaban llenos de pasajeros, sin respetar el aforo permitido y a la vez incumpliendo los protocolos; la mayoría de pasajeros no portaban el protector facial.
El jefe de tránsito, Wilton Arizola, informó que seguirán realizando operativos de manera inopinada, para evitar que irresponsables conductores propaguen el coronavirus atentando contra su salud y la de sus pasajeros. Los vehículos fueron llevados al depósito.