El corazón del Bajo Piura agoniza con su eterno problema del colapso de sus redes de alcantarillado.
Sin embargo, esta vez ya afecta céntricas calles como la Avenida Lima y concurridos negocios que por esta penosa situación se ven afectados por olores nauseabundos, evitando que los clientes lleguen a comprar sus productos.
Lo que más preocupa es la bomba de tiempo que trae consigo esta situación, como es la contaminación que amenaza con explotar en cualquier momento y dejar al cercado y sus asentamientos humanos en una grave situación sanitaria.
Millones al agua
Este panorama se vive en paralelo a la obra de agua que luce prácticamente paralizada con cerca de 60 millones de soles invertidos y con mínimos frentes de trabajo a cargo del Consorcio Saneamiento Norte.
Y en los componentes que son la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales y Línea de Impulsión, pese al paso de dos años; siguen con sus problemas al igual que el saneamiento de los terrenos que aún no tienen expediente reformulado.
Tanque elevado
Otra triste historia de la obra es el tanque elevado en el que para las estadísticas existe un 26% ejecutado. Sin embargo, hoy este luce paralizado abandonado y con la misma historia de siempre, deficiencias en el expediente, el cual es absoluta responsabilidad del Ministerio de Vivienda.
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