Una de las hipótesis que cobra mayor fuerza con relación al crimen del obrero Edwin Gerardo Castro Flores (41) sería la pugna por los cupos de trabajo y dinero de las obras de construcción civil. Esto debido a que el fallecido tenía amistad con varios integrantes de un gremio de construcción del asentamiento San Pedro y alrededores de Piura.
Se conoció que Castro se desempeñaba como obrero en algunas obras y también se dedicaba al taxi moto. La tarde que fue ultimado, de cinco balazos por dos sicarios, llegó en una motocicleta al taller situado en el asentamiento Ignacio Merino de Piura.
Según las primeras diligencias del caso, los criminales motorizados fueron alertados de la llegada de Castro al taller. Así, llegaron a los minutos para balearlo y luego darse a la fuga en una motocicleta con dirección desconocida.
Lo atacaron fuera de su barrio
Los sicarios esperaron que Castro saliera de su zona para asesinarlo a tiros por un probable ajuste de cuentas. Las heridas letales en el cráneo y tórax le provocaron la muerte en cuestión de segundos en el taller.
El encargado del taller y su ayudante además de otra persona se libraron de ser alcanzados por las balas. Cabe señalar que luego del asesinato, un sujeto identificado con las iniciales W. E. B. C. (24) fue detenido por la Policía.
La víctima mortal registraba antecedentes por tenencia ilegal de arma de fuego y robo agravado. Sus familiares aseguran que se dedicaba a trabajar legalmente por lo que exigen una exhaustiva investigación policial y judicial.
Las investigaciones del asesinato se encuentran a cargo de personal de la Divincri Piura, División Regional de Inteligencia y del Grupo de Intervenciones Rápidas (GIR) de la Comisaría de Piura. Se dice que una cámara de seguridad habría captado la huida de los criminales en una moto.











