Ante las nuevas restricciones de horario y aforo impuestas por el Gobierno para enfrentar la tercera ola, dos especialistas manifestaron que el impacto económico de estas medidas es moderado a comparación del inicio de la pandemia.
Sin embargo, mostraron su preocupación por la reactivación de los sectores turismo y servicios si la situación sanitaria se complicara y obligue al Gobierno a endurecer las restricciones. Como se sabe redujo el aforo en casinos, cines, centros comerciales, galerías, restaurantes, bancos, mercados, entre otros establecimientos.
El presidente de la Cámara de Comercio y Producción de Piura, Javier Bereche, expresó su disconformidad sobre las nuevas restricciones de aforo del 40% y 50% porque los ingresos de los negocios disminuirían aún más.
Además, señaló que se observarán más colas en las calles para poder ingresar a los establecimientos causando un efecto contrario de lo que se pretende evitar.
“Habrá un perjuicio para el ciudadano que va a tener menos disposición de servicios en restaurantes, centros comerciales, bancos y cines”, declaró.
Consideró que el camino para enfrentar la tercera ola no está en el endurecimiento de las restricciones sino en promover la inmunización como se viene haciendo en el exterior: “¿Por qué no apostar más bien por la vacunación, el uso de mascarilla y el distanciamiento como otros países están haciendo?”.
Además, hizo un llamado a los empresarios y ciudadanos a ser responsables: “Si vamos hacer uso de cualquier servicio tenemos que estar vacunados y estar solo con nuestro grupo familiar. Podemos vencer la batalla al COVID reactivados. Si no hacemos esto, lamentablemente vamos a caer en más olas porque el virus no va a desaparecer por lo tanto hay que aprender a adaptarnos”.
Por su parte, para el exdecano del Colegio de Economistas de Piura, Williar Hidalgo, estas medidas podrían impactar en los inversionista y empresarios ligados al rubro de turismo.
“Muchos pensaron que este año era su año de recuperación pero hasta ahora el panorama no es favorable, esperamos que el Gobierno no imponga las restricciones más severas porque el 80% de la población ya está vacunada”, dijo.
Además, sugirió medidas más estrictas para las personas que no desean vacunarse e incumplen irresponsablemente con los protocolos de bioseguridad
“El Gobierno debe ser más exacto con las medidas y enfocarse en las personas no vacunadas, con un virus no tan letal tiene que pesar el tema económico por encima del tema restrictivo”, infirió.
Asimismo, señaló que la decisión de no vacunarse contra la COVID-19 genera un gran costo al Estado porque la mayoría de las personas que ahora permanecen en UCI no están inmunizadas.
Finalmente, lamentó que las sanciones por el incumplimiento de las medidas no se apliquen a todos las personas por igual: “Creemos que la normatividad la debe cumplir algunos pero los privilegiados no. Las reglas están hechas para cumplir y las autoridades deben velar por esto. hacemos de la vista gorda al final las restricciones quedan en un saco roto”
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