El joven estibador y vendedor de caramelos, Javier Alexander Zárate Cruz (35), fue asesinado de cuatro puñaladas por tres sujetos que lo atacaron frente a su vivienda.

El hecho ocurrió cuando Javier Zárate salió en defensa de sus tres sobrinos que jugaban en la calle, donde se generó un enfrentamiento -a pedradas- entre dos bandos.

Un familiar contó que cuando Javier regresaba a su casa, uno de los sujetos, conocido como “El Paisa”, lo llamó y le pidió que levante las manos. Esto fue aprovechado por el delincuente para asestarle una puñalada cerca del corazón.

Otro delincuente apodado “El Varo”, le propinó otros dos cortes en el estómago y otro en la espalda. Ya al borde de la muerte, un tercer asesino apodado con el alias “Cañaco”, le lanzó una pesada piedra en la boca, para que no grite.

El herido fue llevado al Hospital de Apoyo II, donde los médicos no pudieron salvarlo. Los familiares descartan que haya tenido una antigua enemistad.