La canasta básica familiar está subiendo su precio debido a la inestabilidad del país. Especialistas estiman que la inflación llegaría, a fin de año, a un alza de S/2,5 por cada S/100 de compra.
El kilo de pollo ha subido hasta los S/6,25 entre los comerciantes mayoristas de la capital. Así, de acuerdo a datos del Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri), el precio del pollo se ha elevado sostenidamente desde el 27 de abril (pasó de S/4,35 a S/4,85).
Pero no solo este insumo estaría elevando su costo, sino que también estarían en riesgo otros productos de la canasta básica familiar, debido a los precios en el mercado internacional y al ruido político interno.
Cabe resaltar que, según la Encuesta de Expectativas Macroeconómicas de abril del Banco Central de Reserva el Perú (BCR), los agentes económicos mantienen sus expectativas de inflación para este y los próximos dos años: en 2021, la inflación sería de entre 2,2% y 2,5%; mientras que para el 2022 y 2023, sería entre 2,0% y 2,3%.
En marzo, el BCR informó que las expectativas de inflación se ubicaban entre 2% y 2,2%, pero en abril, estas subieron a 2,5%.
“Esto implica que si antes la leche te costaba 100 soles, para fin de año te costará 102,5. La inflación será de 2,5 por cada 100 soles”, comentó el presidente de la Cámara de Comercio, Javier Bereche.
Los factores
“La inflación para este año ha subido por la inestabilidad política. Por otro lado, los precios de todo están subiendo en el mercado internacional: alimentos, productos básicos, esos aumentos de cosas que importamos. No es solo que haya subido el precio en su ciudad de origen, sino que a nosotros nos cuesta en dólares”, comentó Bereche.
Ante ello, al BCR le tocará jugar un rol importante en los próximos meses, pues no solo tendrá que usar mecanismos para el control de la inflación, sino para controlar el tipo de cambio, como lo ha estado haciendo durante las semanas pasadas, con la venta directa de millones de dólares; o también podría bajar las tasas de interés de encaje para abaratar el crédito y reducir la inflación.
Pese a este control, el BCR no puede modificar los precios internacionales ni tampoco los mensajes que den los candidatos presidenciales, quienes influyen en la volatilidad del dólar.