El brote de ébola en la República Democrática del Congo (RDC), declarado el pasado 4 de septiembre, ha dejado hasta el momento 31 fallecidos, informó la Organización Mundial de la Salud (OMS). Mientras tanto, el país espera recibir en los próximos días 45,000 dosis adicionales de vacunas para reforzar la respuesta sanitaria.
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Según los últimos datos de la OMS, se han registrado 48 casos (38 confirmados y 10 probables) y se han identificado cerca de 900 contactos en seguimiento. De los fallecidos, 21 corresponden a casos confirmados y 10 a probables.
Vacunación y control del brote
Hasta el momento, 591 personas han sido inmunizadas con la vacuna Ervebo, que protege contra la cepa Zaire, confirmada como la responsable del brote. Entre los vacunados se encuentran 284 trabajadores sanitarios y de primera línea, así como 307 contactos y contactos de contactos.
Actualmente hay unas 4,000 dosis disponibles en la zona afectada, principalmente en Bulape, provincia de Kasai, donde se concentran todos los casos confirmados. Se prevé que entre este viernes y domingo lleguen las 45,000 dosis adicionales, financiadas por el Grupo Internacional de Coordinación para el Suministro de Vacunas.
“La rápida intensificación de las intervenciones ha logrado frenar la transmisión. Tenemos la vacuna, equipos de rastreo y todos los ingredientes necesarios para controlar el brote con rapidez”, afirmó el epidemiólogo Patrick Otim, de la Oficina Regional de la OMS para África.
Sin embargo, advirtió que “nunca se puede bajar la guardia” ante el ébola, ya que un entierro sin control o un contacto no detectado podría desatar nuevos contagios.
Retos logísticos y cooperación internacional
La remota ubicación de Bulape dificultó la distribución inicial de vacunas, que requieren mantenerse en cadena de frío y aplicarse en un plazo máximo de 14 días. Para superar este desafío, la OMS contó con el apoyo de la misión de la ONU en la RDC (Monusco) y del Programa Mundial de Alimentos (PMA), que facilitaron el transporte aéreo.
Además, la OMS trabaja con Angola y otros países fronterizos para evitar la propagación del virus, con el apoyo de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) en el monitoreo de la movilidad poblacional.
Un virus con alta mortalidad
Este es el decimosexto brote de ébola en la RDC desde su descubrimiento en 1976, y el primero registrado en la provincia de Kasai desde 2008. La enfermedad, considerada una de las más letales, tiene una tasa de mortalidad que oscila entre el 60% y 80%, según la OMS.
La jefa de la Unidad de Atención Segura y Escalable de la OMS, Janet Díaz, destacó que los centros de tratamiento cuentan con estructuras seguras, circuitos controlados y los medicamentos necesarios para atender a los pacientes. Actualmente, 15 personas permanecen hospitalizadas, mientras dos pacientes ya recibieron el alta médica.
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