Un reciente reportaje del canal chileno T13 (Teletrece) ha generado preocupación pública tras exponer denuncias de camioneros que aseguran que algunos policías peruanos estarían cobrando hasta 100 dólares para permitir el tránsito de migrantes en la frontera entre Perú y Chile. La acusación pone en entredicho los controles aplicados en la Línea de la Concordia, zona donde se ha intensificado la vigilancia ante el incremento de personas intentando abandonar territorio peruano rumbo al país vecino.
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Despliegue militar en la frontera sur
Según la cobertura del medio chileno, el Ejército del Perú permanece desplegado en la zona fronteriza para reforzar los controles migratorios, especialmente en los sectores de Palca, Tacna y La Yarada–Los Palos. Se trata de áreas estratégicas donde se registra mayor circulación de personas intentando cruzar hacia Chile, a veces por pasos no habilitados.
El Gobierno peruano declaró el pasado viernes el estado de emergencia en esta franja fronteriza, una medida que estará vigente por 60 días. El objetivo es frenar el ingreso y tránsito de migrantes indocumentados, así como fortalecer los patrullajes con apoyo militar las 24 horas del día.
Autoridades informaron también que este lunes 1 de diciembre se desarrollará un Comité Binacional de Fronteras entre Perú y Chile, en el que las delegaciones de ambos países analizarán la situación migratoria y buscarán acuerdos para enfrentar en conjunto la problemática en la frontera sur.
Camioneros denuncian presunta corrupción policial
Pese al despliegue de uniformados, el escenario en los límites territoriales ha sido motivo de polémica. El reportaje de T13 reveló que, al segundo día del estado de emergencia, llegaron 50 militares para reforzar la seguridad. Según la información difundida, 11 de ellos custodian un tramo de 18 kilómetros hacia el mar, mientras que otros 14 vigilan una extensión superior a los 130 kilómetros en dirección hacia Bolivia.
En total, apenas 25 efectivos por turno se encargan de patrullar la zona durante toda la jornada, un número que —según transportistas y vecinos— sería insuficiente frente al flujo constante de migrantes que intentan cruzar la frontera.
“Hay corrupción”, afirma un camionero
Durante su entrevista con la prensa chilena, un camionero peruano identificado solo como Cristián aseguró que existirían actos irregulares relacionados con el presunto cobro de dinero para permitir el paso migratorio. “De repente hay corrupción con la policía también, porque desde ahora, 10, 11 horas, pasan de cantidad, porque al día siguiente ya no se ve nada, está vacío, y la gran pregunta es: ¿dónde están?”, declaró.
El testimonio dejó en evidencia una de las principales preocupaciones compartidas por transportistas y habitantes de la zona: la aparente ausencia de migrantes luego de ciertos horarios, lo que indicaría que estarían siendo trasladados o guiados por rutas no oficiales de la frontera.
Disminución repentina de migrantes genera sospechas
Vecinos de Chacalluta señalaron que a inicios de la semana se contabilizaban alrededor de 100 migrantes. Sin embargo, durante el fin de semana apenas quedaban 14. La reducción drástica generó inquietudes respecto a un posible manejo irregular por parte de algunos agentes responsables de la seguridad fronteriza.
Estos movimientos, según los denunciantes, no coinciden con operativos oficiales ni con acciones de control migratorio anunciadas por el Gobierno, lo que alimenta las dudas sobre quiénes estarían facilitando los cruces y bajo qué condiciones.
“Cobran hasta cien dólares para pasar”
Otro camionero, identificado como Alejandro, reforzó las sospechas al afirmar que se cobraría dinero para permitir el paso de personas sin documentos. “Cobran hasta cien dólares para pasar. No sé cómo hacían pasar, pero lo hacían, eso es lo que decían. No sabían por dónde, otros pasaban caminando o por el cerro, pero hay una corrupción completa”, sostuvo.
Sus declaraciones apuntan a la existencia de rutas alternas empleadas por los migrantes para sortear los controles oficiales en la frontera, lo que coincidiría con denuncias previas de pasos clandestinos utilizados durante los últimos años en Tacna y Arica.
Reacciones en redes y pedido de investigaciones
Las denuncias difundidas por T13 generaron un intenso debate en redes sociales tanto en Perú como en Chile. Usuarios exigieron que se investiguen las presuntas irregularidades dentro de las entidades encargadas de resguardar la frontera, mientras otros criticaron la falta de personal y equipamiento para atender un problema migratorio que se ha vuelto recurrente.
Las reacciones también incluyeron cuestionamientos sobre la necesidad de fortalecer el trabajo bilateral entre ambos países, pues los flujos migratorios en la zona no se limitan a ciudadanos peruanos o chilenos, sino que involucran a personas provenientes de diversas nacionalidades que buscan continuar su tránsito hacia el sur del continente.
Preguntas frecuentes sobre la situación en la frontera Perú–Chile
¿Qué motivó el estado de emergencia en la zona?
El estado de emergencia fue declarado por el Gobierno peruano debido al incremento de migrantes intentando cruzar hacia Chile y la necesidad de reforzar los controles en la frontera. La medida permite el apoyo del Ejército en tareas de vigilancia y estará vigente por 60 días.
¿Qué denuncian los camioneros?
Los transportistas entrevistados por T13 afirman que algunos policías estarían cobrando hasta 100 dólares para permitir el paso de migrantes por la frontera, además de señalar movimientos sospechosos de personas durante ciertos horarios.
¿Hay coordinación entre Perú y Chile?
Sí. Ambos países sostendrán un Comité Binacional de Fronteras para analizar la situación migratoria y coordinar acciones conjuntas frente a los cruces irregulares.
¿Por qué disminuyó súbitamente el número de migrantes?
La reducción repentina de migrantes en Chacalluta ha generado sospechas entre vecinos y camioneros, quienes consideran que podría deberse a un manejo irregular en la vigilancia de la zona. Las autoridades aún no han dado una explicación oficial.











