La circulación acelerada de la “supergripe” H3N2, una variante de la influenza A, está provocando un escenario de alerta en el Reino Unido y encendiendo preocupaciones en Estados Unidos. El subtipo A(H3N2), conocido por su rápida transmisión y por generar síntomas más intensos que otras cepas estacionales, avanza con fuerza, presionando los sistemas hospitalarios y reactivando medidas preventivas como el uso de mascarillas en centros médicos.
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¿Qué caracteriza a la “supergripe” H3N2 y por qué genera tanta preocupación?
La influenza A(H3N2) se ha consolidado como una de las variantes más desafiantes debido a su capacidad de mutación constante. En esta temporada, la atención está puesta en el subclado K, una mutación que permite al virus evadir parte de la inmunidad adquirida en temporadas anteriores. Esta característica, explican especialistas, favorece un aumento significativo en los contagios y eleva la presión sobre los servicios sanitarios, que ya reportan saturación en varios puntos del Reino Unido.
Medios británicos como The Telegraph y Mirror informaron que la situación ha llevado a centros hospitalarios a retomar el uso obligatorio de mascarillas en algunas unidades, una medida que no se veía desde los momentos más críticos de la pandemia. El rápido avance del virus ha generado que los especialistas lo denominen de manera informal como una “supergripe”.
Situación en el Reino Unido: hospitales al límite
El Reino Unido enfrenta una temporada de gripe adelantada y con una tendencia creciente. De acuerdo con la Agencia de Seguridad Sanitaria británica (UKHSA), las hospitalizaciones por influenza llegan a 7,79 por cada 100 mil habitantes, cifra que se ubica en un nivel “medio”, pero que continúa en ascenso.
The Telegraph reportó que las áreas de urgencias viven una de sus semanas más exigentes desde 2010. La doctora Nisa Aslam, del Servicio Nacional de Salud (NHS), describió salas “repletas de pacientes enfermos”, reflejo del incremento sostenido de personas que requieren atención médica por complicaciones relacionadas con la “supergripe” H3N2.
Uno de los cambios más notorios ha sido la reintroducción del uso de mascarillas en hospitales como Sherwood Forest Hospitals, en Nottinghamshire. Mirror explicó que estas medidas buscan frenar la transmisión del subtipo H3N2, que se expande con facilidad entre personas con baja inmunidad reciente.
El avance del subclado K y su impacto
El profesor Simon Clarke explicó a The Telegraph que las mutaciones del subclado K, aunque pequeñas, permiten que el virus evada parcialmente la inmunidad generada por contagios o vacunaciones previas. Esta capacidad de escape inmunitario abre la puerta a olas más tempranas y prolongadas, lo que repercute directamente en la saturación hospitalaria y en el aumento de casos graves, especialmente en población vulnerable.
Estados Unidos: vigilancia reforzada y temor a un escenario similar
Al otro lado del Atlántico, Estados Unidos observa con atención lo ocurrido en Europa. “Sabemos que Inglaterra u otros lugares pueden ser un indicador de lo que sucederá aquí, porque su temporada de gripe comienza unas semanas antes que la nuestra”, señaló la doctora Tara Narula a ABC News.
Aunque los niveles actuales en EE.UU. aún están por debajo de los registrados en el Reino Unido, la tendencia es clara: los contagios están aumentando. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) informaron que la actividad gripal creció un 7% en la última semana, una señal de que el avance de la “supergripe” H3N2 podría intensificarse durante las próximas semanas.
Primeras restricciones en hospitales estadounidenses
Algunos centros médicos ya aplican medidas preventivas. El Centro Médico de Detroit y el Hospital de Niños de Michigan limitaron a dos los visitantes por paciente, además de restringir el ingreso a menores de 13 años en las unidades de hospitalización. Estas decisiones buscan evitar brotes internos mientras se monitorea el aumento de contagios en la región.
Advertencias de organismos internacionales
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) exhortó a los países de la Región de las Américas a reforzar la preparación y organización de sus sistemas de salud ante el incremento de casos de influenza y otros virus respiratorios. La entidad enfatizó la importancia de anticiparse a escenarios de alta demanda médica, especialmente en momentos en que el hemisferio norte atraviesa su temporada más activa de contagios.
Tanto en el Reino Unido como en Estados Unidos, las autoridades sanitarias insisten en la vacunación como la principal herramienta para reducir complicaciones graves. Asimismo, recomiendan mantener hábitos básicos que complementan la protección: lavado frecuente de manos, ventilación de espacios cerrados y uso de mascarilla en caso de presentar síntomas respiratorios.
Preguntas frecuentes sobre la “supergripe” H3N2
¿Por qué se le llama “supergripe”?
El término no es oficial, pero se ha popularizado entre medios y especialistas debido a la alta transmisibilidad del subtipo H3N2 y a las mutaciones que dificultan la respuesta inmunitaria, lo que genera brotes más amplios y presión hospitalaria.
¿La H3N2 es más peligrosa que otras variantes?
La influenza H3N2 suele asociarse a temporadas de gripe más severas, especialmente en adultos mayores, niños pequeños y personas con enfermedades preexistentes. Sus mutaciones frecuentes la convierten en una variante especialmente desafiante para las campañas de vacunación.
¿Se recomienda volver al uso de mascarillas?
No existe una recomendación global obligatoria, pero varios hospitales en el Reino Unido ya han retomado su uso en áreas específicas. En general, se aconseja utilizar mascarilla en espacios cerrados o concurridos si se presentan síntomas respiratorios.
¿Cómo puedo protegerme de la influenza H3N2?
Las autoridades sanitarias recomiendan vacunarse, lavarse las manos de manera constante, ventilar ambientes, evitar contacto cercano con personas enfermas y utilizar mascarilla en caso de síntomas. Estos hábitos pueden limitar de forma significativa la transmisión del virus.











