El presidente de la República, Pedro Castillo, planteó en la septuagésima sexta asamblea general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la suscripción de un acuerdo mundial entre los jefes de Estado y los propietarios de las patentes de las vacunas contra la covid-19, para que la población acceda a las dosis sin algún tipo de discriminación o privilegios.
En su intervención, manifestó que el Perú será un miembro activo y dinámico para que todos los países en el mundo tengan el acceso inclusivo, equitativo y no discriminatorio a todos los diagnósticos, terapias, medicamentos y vacunas contra el virus.
“Quiero plantear en nombre del Perú la firma de un acuerdo mundial entre los jefes de Estado y los propietarios de las patentes para garantizar el acceso universal a las vacunas para todos los habitantes sin discriminación, ni privilegios, lo cual sería una muestra de nuestro compromiso con la salud y la vida de todos los pueblos”, indicó.
El mandatario también recalcó en la necesidad de otorgar una prioridad esencial al fortalecimiento de la cooperación científica internacional para combatir la pandemia a nivel mundial.
Manifestó que las vacunas han abierto el camino y la fe de la humanidad para asumir la convicción que esta batalla será ganada por la humanidad. Sin embargo, el combate a la pandemia demostró la incapacidad del sistema internacional para cooperar bajo los principios de la solidaridad y la eficiencia.
“Necesitamos acuerdos que aseguren la equidad en el acceso a las vacunas y su aplicación, la cooperación multilateral es aún el gran ausente en la lucha contra la covid-19«, apuntó.
El mandatario también recalcó que tiene una gran responsabilidad con las poblaciones vulnerables, emprendedores, clase media y todos los peruanos sin exclusiones, por lo que su Gobierno apuesta por la inclusión social que elimine las desigualdades y la injusta distribución de la riqueza, para construir una sólida sociedad democrática donde la libertad y los derechos civiles sean garantizados por un estado democrático.
“Reafirmo la vocación y la filiación democrática de mi Gobierno y su compromiso con la justicia social, la tarea no es solo consolidar el Estado de Derecho y la división de poderes, sino hacerla efectiva en la vida política y en el ejercicio de los derechos de la población, día a día”, subrayó.
Durante su discurso, el mandatario manifestó que a pesar de los estragos de la pandemia por la covid-19, el Perú transitará por un manejo responsable y eficiente de sus recursos para continuar expandiendo el crecimiento económico y asegurar la redistribución de los ingresos.
El jefe de Estado dijo que es necesaria una “transformación social” que permita a todos los peruanos y peruanas gozar de sus derechos económicos y sociales, además de las libertades fundamentales y los derechos civiles y políticos.
“Una transformación que realice en los hogares de cada familia, sus derechos a la educación, a la salud, al empleo decente, al salario digno, a la seguridad social, a la vivienda y el acceso a una vida individual económica y colectiva, respetuosa de la madre tierra”, manifestó.
En tal sentido, el presidente Castillo agregó que respalda la iniciativa del secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, para construir una agenda común, que en un mundo post pandemia, establece un nuevo contrato social.
“Ese diagnóstico y esa misma voluntad del nuevo contrato social global inspira la acción trasformadora de mi pueblo. Se trata de construir un nuevo pacto social en el Perú, que asegure la gobernabilidad democrática, con paz y cohesión social y que logre reducir drásticamente la pobreza y eliminar la pobreza extrema, que reduzca las desigualdades que deje en el pasado la exclusión y el racismo”, manifestó.