El lavado de manos es una de las recomendaciones de las instituciones de salud para prevenir el coronavirus.
Pero no solo eso, el lavado de manos disminuye la transmisión de enfermedades, tales como:
- Diarrea
- Neumonía
- Parasitismo intestinal
- Infecciones respiratorias
- Enfermedades de la piel y de los ojos
¿Cuando debo lavarme las manos?
El contacto con otras personas, superficies y objetos a lo largo del día hace que se acumulen gérmenes en las manos. Puedes infectarte con estos microorganismos al tocarte los ojos, la nariz o la boca, o transmitirlos a otras personas. Si bien es imposible que las manos estén libres de gérmenes, lavarse las manos con frecuencia puede ayudar a limitar la transferencia de bacterias, virus y otros microbios.
Siempre lávate las manos antes de hacer lo siguiente:
- Preparar comidas o comer
- Curar heridas o cuidar a un enfermo
- Colocar o quitar lentes de contacto
Siempre lávate las manos después de hacer lo siguiente:
- Preparar comida
- Usar el inodoro, cambiar un pañal o limpiar a un niño que ha usado el inodoro
- Tocar un animal, alimentos para animales o un desecho animal
- Sonarse la nariz, toser o estornudar
- Curar heridas o cuidar a un enfermo
- Manipular basura
- Manipular alimentos para mascotas o golosinas para mascotas
Además, lávate las manos cuando tengan suciedad visible.
¿Cómo debo lavarme las manos?
Hay una técnica de 11 pasos que recomiendan los especialistas, esta es la manera correcta de lavarse las manos.
- Mójese las manos con agua.
- Deposite en la palma de la mano una cantidad de jabón suficiente para cubrir la superficie de las manos.
- Frótese las palmas de las manos entre sí.
- Frótese la palma de la mano derecha contra el dorso de la mano izquierda, entrelazando los dedos y viceversa.
- Frótese las palmas de las manos entre sí, con los dedos entrelazados.
- Frótese el dorso de los dedos de una mano con la palma de la mano opuesta, agarrándose los dedos.
- Frótese con un movimiento de rotación el pulgar izquierdo, atrapándolo con la palma de la mano derecha y viceversa.
- Frótese la punta de los dedos de la mano derecha contra la mano izquierda, haciendo un movimiento de rotación y viceversa.
- Enjuáguese las manos con agua.
- Séquese las manos con una toalla de un solo uso.
- Utilice la toalla para cerrar el grifo.
Con información de Mayo Clinic.