Una bomba ha sacudido el ámbito real con las revelaciones de Carrie Royale, una bailarina exótica de 52 años, quien asegura tener en su posesión fotografías comprometedoras del príncipe Harry.
Según sus afirmaciones, estas imágenes muestran al nieto de la difunta reina Isabel II completamente desnudo durante un encuentro que tuvo lugar en Las Vegas en el año 2012.
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Royale no se ha detenido en sus declaraciones, también ha compartido detalles sobre la subasta de la ropa interior del príncipe, la cual habría sido adquirida recientemente por el propietario de un club nocturno en San Diego por una suma considerable.
Según sus palabras, el dueño del club, Dino Palmiotto, habría desembolsado la sorprendente cifra de 250.000 dólares por esta prenda tan peculiar.
La bailarina exótica ha dejado claro que no tiene la intención de vender las fotos, sino que planea exhibirlas personalmente en su cuenta de OnlyFans, con la esperanza de recaudar al menos «un par de millones de dólares».
Esta amenaza de revelar imágenes íntimas del príncipe ha generado un gran revuelo en la prensa internacional, dejando al descubierto un escándalo que podría tener importantes repercusiones en la corona británica.