El aumento de contagios en el país y, consecuentemente, los casos graves y hasta las muertes pueden ser producto de falsas creencias ante la pandemia. Esto va desde reconocer la existencia del virus hasta la relajación y descuido en la aplicación de las medidas de bioprotección.
Considerar que el virus no existe. Muchas personas piensan que el nuevo coronavirus y sus efectos son invenciones sin sustrato y que buscan perjudicar a la gente.
Creer que el no tener síntomas es seguro. Las estadísticas demuestran que un alto número de personas contagiadas por el virus no presentan síntoma. Sin embargo, su capacidad para contagiar es igual que quienes sí desarrollan la enfermedad.
Confundir flexibilización con relajación. Algunos creen que la flexibilización se da porque el virus ha mermado su circulación e incluso visitan familiares, amigos y parejas o promueven fiestas caseras.
Automedicarse. Desconocer que para el COVID-19 no existe ningún medicamento que prevenga el contagio y evite la enfermedad y echar mano de recetas divulgadas a través de las redes sociales sin ningún tipo de soporte puede resultar mortal.
Datos
* La ministra de Salud, Pilar Mazzeti, admitió esta semana un repunte de casos de COVID-19 tras la flexibilización de medidas contra la enfermedad.
* Algunas actividades, como los viajes interprovinciales, han vuelto a reaperturar este mes.