Estados Unidos planteó la apertura de negociaciones en Miami entre representantes de Ucrania y Rusia, una iniciativa que fue confirmada por el presidente ucraniano, Volodímir Zelensky, y que marca un nuevo esfuerzo internacional por avanzar hacia un acuerdo de paz. La propuesta contempla la participación de aliados europeos y se produce en un escenario de recrudecimiento de la guerra, con Rusia manteniendo su ofensiva y Kiev insistiendo en garantías de seguridad duraderas.
PUEDES LEER ► Gustavo Petro responde a Trump y lo invita a Colombia para enseñarle la destrucción de laboratorios sin uso de misiles
Zelensky detalló que Washington propuso un esquema de diálogo tripartito, con la participación de Ucrania, Estados Unidos y Rusia, y consideró razonable la incorporación de delegaciones europeas una vez evaluados los primeros resultados. Las conversaciones comenzaron este viernes en Miami y se extenderán durante el fin de semana, con la presencia de altos funcionarios estadounidenses como el secretario de Estado, Marco Rubio; el enviado especial Steve Witkoff; y Jared Kushner, además de representantes europeos.
Desde Moscú, el enviado ruso Kirill Dmitriev confirmó su viaje a Miami para sumarse a la nueva ronda de diálogos, mientras que el presidente Vladimir Putin reiteró que Rusia continuará con su ofensiva militar y condicionó cualquier alto el fuego a la disposición de Kiev y de sus aliados occidentales. Hasta el momento, el Kremlin no ha emitido una respuesta oficial a la versión de la propuesta ajustada por Ucrania y los países europeos.
El jefe negociador ucraniano, Rustem Umerov, informó que mantiene al presidente Zelensky al tanto de los avances y señaló que ya se acordaron los próximos pasos para continuar el trabajo conjunto. Subrayó además que la prioridad de Kiev es lograr garantías de seguridad sólidas y a largo plazo.
Las reuniones en Miami cuentan con la presencia de funcionarios de Reino Unido, Francia y Alemania. A inicios de mes, Witkoff y Kushner ya habían sostenido encuentros con Umerov en la misma ciudad, aunque sin participación europea, antes de viajar a Moscú para dialogar directamente con Putin. En noviembre, Estados Unidos presentó a sus aliados un plan de 28 puntos para poner fin a la guerra, que generó críticas por considerarse favorable a Rusia y por relegar el rol europeo. Tras ajustes promovidos por Ucrania y sus socios, la propuesta sigue pendiente de respuesta rusa.
Entre los puntos más sensibles figura la posibilidad de ofrecer garantías de seguridad a Ucrania a cambio de eventuales concesiones territoriales, una opción que enfrenta un fuerte rechazo en Kiev. Marco Rubio recalcó que no habrá acuerdo sin el consentimiento de Ucrania y negó que Washington busque imponer condiciones, insistiendo en que ambas partes deben mostrar voluntad para negociar.
Mientras continúan las conversaciones, los combates no se detienen. Un ataque ruso con misiles balísticos en la región de Odesa dejó este sábado ocho fallecidos y 27 heridos. Putin aseguró que las fuerzas rusas avanzan a lo largo de la línea de contacto y controlan cerca del 19 % del territorio ucraniano, incluida Crimea. Además, volvió a afirmar que Rusia no inició el conflicto y sugirió que podría suspender ataques durante una eventual jornada electoral en Ucrania.
Tras el cierre de las reuniones en Miami, Umerov reiteró que se definieron los siguientes pasos para mantener el diálogo. En paralelo, la Unión Europea decidió no utilizar los activos rusos congelados para financiar préstamos a Ucrania, una medida que Moscú calificó de “atraco”. Más de 200.000 millones de euros del Banco Central ruso continúan bloqueados en Bruselas.
En un contexto de alta tensión e incertidumbre, la diplomacia internacional busca abrir un canal de negociación, mientras las partes intentan acercar posiciones en medio de los obstáculos que aún impone la guerra.
Suscríbete a nuestro RSS