Ecuador reforzó este jueves la vigilancia en su sistema penitenciario tras dos amotinamientos que dejaron 21 reos muertos, además de unos 60 heridos, una policía violentada sexualmente y varios fugados.
«Se mantiene una alerta máxima y se han suspendido todas las actividades que puedan poner en riesgo a la población penitenciaria y funcionarios administrativos», indicó el Servicio Nacional de Atención Integral a Privados de la Libertad (SNAI) en un comunicado.
Una fuente de la entidad señaló a la AFP que en algunos centros se suspendieron las visitas.
La tarde del miércoles dos motines en las cárceles de Guayas (suroeste) y Cotopaxi (centro andino) dejaron 21 muertos y 57 heridos, entre ellos tres policías con heridas.
OPERATIVOS DE CONTROL ?@PoliciaEcuador, informa detalles de las acciones operativas ejecutadas en los centros carcelarios de #Guayas y #Cotopaxi.
?Además de las recapturas de los ppl que se habrían fugado en horas de la mañana.
Video ?? pic.twitter.com/nxGcMrdOlW
— Policía Ecuador (@PoliciaEcuador) July 22, 2021
Mujer policía violada
En medio de la revuelta también fue violada una policía, señaló el ministerio de Gobierno, que tildó de «repudiable» el hecho.
Los trece cadáveres hallados en la cárcel de Cotopaxi fueron trasladados al departamento forense de la vecina localidad de Ambato, en la provincia de Tungurahua. En Guayas se reportaron ocho fallecidos.
Hace cinco meses estallaron en el país varias revueltas simultáneas en cuatro prisiones que dejaron 79 reclusos muertos, algunos de ellos decapitados.
Las autoridades señalaron entonces como responsables a bandas criminales con nexos con el narcotráfico que se disputan el poder de las prisiones.
«Gran destrucción»
Los alrededores de las cárceles permanecían fuertemente resguardados por policías y militares, en tanto que familiares de reos se acercaban en busca de información.
«Estoy desesperada porque mi hijo dice que no tiene resguardo policial adentro (…) Los de (pabellones de) mínima y mediana están queriendo acabar con los (presos) de máxima», dijo entre lágrimas a la AFP una mujer que se identificó como Janet.
Otra mujer, cuya identidad fue protegida, relató al canal TC Televisión que recibió una llamada de su hijo recluido en la cárcel de Guayas.
«Me dice: mamá hay una balacera, una bala me quedó en la pierna. Por favor ayúdame», contó.
Alto nivel de violencia
Oswaldo Coronel, gobernador de la provincia de Cotopaxi, lamentó en una rueda de prensa el «nivel de violencia» y el «nivel de conflictividad» en los motines carcelarios.
«Se han utilizado armas de fuego de alto calibre, se ha utilizado también explosivos, lo que ha ocasionado que haya una gran destrucción al interior del centro penitenciario» de Cotopaxi, expresó la autoridad.
En esa prisión también se produjo una fuga de reos al amanecer del jueves. La policía ha logrado capturar a 78. Sin embargo, las autoridades no han precisado cuántos se evadieron.
Ecuador tiene alrededor de 60 cárceles con capacidad para albergar a unas 30.000 personas, pero en la actualidad están tras las rejas unos 39.000 reclusos.
En medio de la pandemia y para reducir la población carcelaria, Ecuador aplicó medidas sustitutivas para quienes cumplían penas por delitos menores, con lo que logró bajar de 42% a 30% la sobrepoblación de las prisiones.
Según la Defensoría del Pueblo, en 2020 hubo 103 asesinatos en las cárceles.
Vía Andina