El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, aseguró este miércoles que su gobierno no cederá ante las mafias ni ante quienes buscan sembrar el miedo entre los ciudadanos, en un contexto marcado por protestas indígenas focalizadas por el alza del diésel y por las acciones militares contra la minería ilegal en varias regiones del país.
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Durante un acto público en el que se anunció la incorporación de más familias al Bono de Desarrollo Humano, Noboa reafirmó el compromiso de su administración con los sectores más vulnerables y advirtió que el Estado actuará con firmeza frente a cualquier intento de desestabilización.
“Ecuador es uno solo”, afirma el presidente Noboa
En su discurso, el mandatario hizo un llamado a la unidad nacional, señalando que “Ecuador es uno solo y cada uno de nosotros tiene que tener eso bastante claro”. Asimismo, criticó a ciertos grupos sociales que, según dijo, buscan obtener privilegios por encima del resto de ciudadanos.
“Hay sectores del país que creen que deberían tener mayores beneficios que ustedes, los que trabajan todos los días por sacar adelante a sus familias”, expresó Noboa ante los asistentes.
El presidente también cuestionó la postura de algunos dirigentes sociales que —según él— utilizan a las comunidades indígenas como herramienta de presión política.
“Cuando vemos ciertos dirigentes que quieren usar de carne de cañón a sus comunidades para atacar no solo a las fuerzas del orden, sino también a comerciantes, transportistas o dueños de pequeñas tiendas, decimos con claridad que eso no es posible en este país”, enfatizó.
“No podemos retroceder ante las mafias”
Noboa reiteró que su gobierno mantendrá la firmeza en la lucha contra la delincuencia organizada, incluso frente a amenazas y atentados recientes. “Existe un presidente que no solo tiene la fuerza para enfrentar a las peores mafias, sino también el corazón para acompañar a las familias que más lo necesitan”, afirmó.
El jefe de Estado destacó la importancia de actuar con equilibrio entre la solidaridad social y la autoridad del Estado. “Hay que saber cuándo extender la mano o dar un abrazo, pero también cuándo no se puede retroceder. Nosotros no podemos retroceder ante las mafias”, subrayó.
Contexto de violencia y minería ilegal
Las declaraciones del mandatario se producen luego de una serie de ataques con coches bomba en Guayaquil, Churute y Cuenca-Molleturo, que las autoridades relacionan con las operaciones contra bandas dedicadas a la minería ilegal en la provincia de Imbabura.
“Hoy, porque estamos bombardeándolos en la minería ilegal en Buenos Aires, están planificando atentados con coches bomba. Pero no vamos a detenernos. Vamos a seguir recuperando el territorio y protegiendo a las comunidades”, manifestó Noboa.
En las últimas semanas, el gobierno ecuatoriano ha intensificado las intervenciones militares en zonas mineras, especialmente en la sierra norte, donde operan grupos que controlan de manera ilegal la extracción de oro y otros minerales. Estas acciones han derivado en enfrentamientos y en un aumento de las amenazas contra las fuerzas del orden.
Protestas por el alza del diésel
Paralelamente, diversas organizaciones indígenas han protagonizado manifestaciones en varias provincias del país para rechazar el incremento del precio del diésel. Aunque las movilizaciones han sido focalizadas y de menor magnitud que las de años anteriores, el gobierno ha advertido que no tolerará bloqueos de carreteras ni actos de violencia durante las protestas.
Noboa señaló que el diálogo con los dirigentes indígenas continúa abierto, pero recalcó que su administración no permitirá el uso de la violencia como mecanismo de presión política.
Compromiso con los sectores vulnerables
El acto de este miércoles también sirvió para que el presidente anunciara la ampliación del Bono de Desarrollo Humano, una política social destinada a apoyar económicamente a familias en situación de pobreza y extrema pobreza.
“Estamos a favor de toda la gente que cree que un nuevo país es posible, un Ecuador donde todos tengan los mismos derechos y oportunidades”, destacó Noboa.
Con esta medida, el gobierno busca mitigar el impacto económico de las recientes alzas en los combustibles y fortalecer los programas de protección social en comunidades rurales y urbanas.
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