Los muertos por la pandemia de covid-19 en Brasil llegaron a 553 este lunes, cuando la cifra de contagiados ascendió a 12,056, según informó el gobierno de Jair Bolsonaro, líder de una ultraderecha que minimiza el impacto de la pandemia.
Los datos, que representan un aumento de 67 fallecidos y de 926 casos confirmados en relación a la víspera, fueron presentados en una rueda de prensa por cinco viceministros del Gobierno, que este lunes sustituyeron a los titulares de sus despachos, que hasta ahora se ocupaban de presentar diariamente los balances.
Uno de los ausentes en la rueda de prensa fue el ministro de Salud, Luiz Henrique Mandetta, quien en los últimos días se ha enzarzado en polémicas públicas con el propio Bolsonaro, sobre todo por su defensa de las cuarentenas como forma de frenar la pandemia.
Bolsonaro, que en ocasiones llegó a calificar al coronavirus de «gripecita», se opone a esas medidas restrictivas, convencido de que «el pueblo precisa trabajar» y de que la parálisis económica en que se ha sumido el país tendrá efectos «hasta peores» que la pandemia.
Vía EFE