El Gobierno de Colombia denunció el intento de homicidio y posterior secuestro de 29 miembros de la Fuerza Pública en el departamento del Cauca, ubicado en el suroeste del país. Estos hechos se produjeron en medio de la Operación Perseo, lanzada en octubre por el Ejército Nacional con el objetivo de recuperar el control de la zona de una disidencia de las FARC.
Según el ministro de Defensa, Pedro Sánchez Suárez, los incidentes ocurrieron el jueves en las localidades de El Plateado y La Hacienda, en los municipios de Argelia y El Tambo. El ministro de Defensa indicó que la seguridad y la vida de los miembros secuestrados son responsabilidad directa de los responsables de este ataque
PUEDES LEER ►Trump crea una Reserva Estratégica de Bitcoin un día antes de la cumbre de criptomonedas de la Casa Blanca
¿Cómo fue el secuestro a miembros de la Fuerza Pública?
Aunque el ministro no especificó la identidad de los secuestrados, medios locales han informado que la mayoría de los afectados son agentes de la Policía, quienes el día anterior participaron en la represión de una revuelta de los habitantes de El Plateado contra el Ejército. Además, los manifestantes incendiaron dos vehículos oficiales durante los disturbios.
El ministro Sánchez Suárez responsabilizó de los ataques al grupo armado Carlos Patiño, una facción disidente de las FARC, y a ciudadanos manipulados por esta agrupación. Según el ministro, estos grupos actúan con «ferocidad», y se infiltran en la población civil al vestirse de manera civil para agredir a las fuerzas del orden.
Además, Sánchez destacó que el grupo de Carlos Patiño no solo recluta menores de edad de manera forzada, sino que también coacciona a las comunidades para expulsar a la Fuerza Pública, impidiendo que las instituciones del Estado ofrezcan servicios como educación, salud y oportunidades laborales a la población local.
PUEDES LEER ► Tragedia en Corea del Sur: avión de combate lanza 8 bombas por error y deja 15 heridos
La ‘Operación Perseo’ y el Control del Territorio
El 12 de octubre de 2024, el Ejército colombiano inició la Operación Perseo, desplegando más de mil soldados en un intento por recuperar El Plateado, un bastión estratégico del grupo Carlos Patiño, parte del Estado Mayor Central (EMC), la principal facción disidente de las FARC dedicada al narcotráfico. A pesar de los esfuerzos militares, cinco meses después, el grupo armado aún mantiene el control de la región.
El ministro Sánchez enfatizó que, desde el inicio de la operación, las fuerzas del orden han enfrentado constantes amenazas por parte de Carlos Patiño, quien busca sembrar el miedo y frenar la implementación de proyectos sociales en la región, lo que afecta directamente a las comunidades locales.